Una veintena de responsables de la organización agraria, agricultores, ganaderos y representantes de las comunidades de usuarios de aguas subterráneas (CUAS) participaron este martes en un acto simbólico que se celebró en la presa de Campos del Paraíso, por donde discurre la obra de la tubería manchega, para protestar por la falta de apoyo para el campo.
Según el secretario general de la organización agraria y presidente de Asaja de Cuenca, José María Fresneda, en Castilla-La Mancha con el agua "nunca jamás se ha hecho absolutamente nada".
Ha lamentado que nunca se haya facilitado que llegue el agua a los que lo necesitan.
“Queremos agua, que el agua no sea un conflicto y que sirva para generar un sistema productivo importante en nuestra región”, ha concluido.