La gigafactoria estadounidense Cummins ha arrancado en Guadalajara la construcción de su primera planta en Europa de electrolizadores para la producción de hidrógeno verde con la puesta de la primera piedra de una planta en la que se van a invertir unos 80 millones de euros, que se estima que empezará a producir los primeros sistemas a principios de 2024 y que creará inicialmente unos 150 puestos de trabajo de alta cualificación, con la posibilidad de incrementar la plantilla en 200 más a medida que aumente la producción.
La puesta de esta primera piedra de Cummins en el Polígono del Ruiseñor de la capital ha contado con la vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera; quien ha apuntado que “con esta primera piedra empieza una aventura desde el mundo hacia España y desde Guadalajara hacia el mundo", todo ello en un contexto en el que se avanza todavía muy despacio en términos de descarbonización y seguridad climática y en el que queda mucho recorrido que hacer.
En este sentido, la ministra ha dicho que el gas natural debe seguir computando como una posibilidad ya de transición, agradeciendo a los directivos de Cummins la confianza demostrada en el tejido español y avanzando la necesidad de seguir creciendo porque "es un tren que no debemos perder sino que hay que ser inteligentes en la manera de producir energía".