La ciudad de Guadalajara toma la iniciativa y contará por fin con un Plan de Infraestructura Verde y un Plan Director del Arbolado, que situará esta capital entre las localidades punteras en su cuidado y mantenimiento, siendo también susceptible de mejoras a lo largo de toda su vigencia. El fin es conseguir una capital más conectada con la naturaleza y resiliente ante un clima cada vez más extremo.
El anuncio lo hacía este jueves el concejal de Medio Ambiente, José Luis Alguacil, que, acompañado del equipo redactor que ha realizado este trabajo, definía los siete grandes objetivos planteados y que pasarán por la mitigación y adaptación al cambio climático; la mejora de la conectividad y del estado ecológico del término municipal compatibilizándolo con el desarrollo urbanístico, y la mejora del empleo.
A ello se unirá también el progreso en el vínculo social y medio ambiente así como en la salud pública de los ciudadanos, objetivos que para Alguacil se pueden resumir en "reforzar el vínculo de la ciudadanía" con el territorio para dar a conocer la calidad ambiental que aún conserva Guadalajara.
Con ambos planes se plantea la articulación de acciones inspiradas en soluciones basadas en la naturaleza, al margen de la sostenibilidad global de todo el término municipal.
Para ello, el Ayuntamiento toma la iniciativa para delimitar e identificar los elementos de la infraestructura verde en todos sus ámbitos de actuación, planificar su gestión y coordinarlo con el resto de los planes municipales. "Será otra de las patas que regirá el desarrollo de la ciudad en los próximos años", señalaba Alguacil en su intervención, anunciando, igualmente, la realización previa de un diagnóstico y un planteamiento de modelo de ecología del paisaje y valoración económica de los costes.
