El ex presidente de Castilla-La Mancha, José Bono, ha dicho que “algo estaremos haciendo que es mejorable para que la extrema derecha tenga esos votos”.
Declaraciones de Bono en el programa La Brújula de Castilla-La Mancha, en Onda Cero, donde también se ha mostrado favorable a que la alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, sea la secretaria general del Psoe en la Agrupación Local de la ciudad.
“Me parece normal que quiera ser secretaria general, lo que me parecería muy extraño es que la alcaldesa de Toledo no quisiera saber nada del partido en Toledo; el que quiera dirigirlo es perfectamente normal”, indicó.
En este sentido, añadió que “Emiliano García-Page es secretario general del territorio en el que gobierna, Castilla-La Mancha; el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, lo es a nivel de toda España… A mí eso me parece que es normal y muy razonable”.
Respecto a la cuestión de establecer un cordón sanitario a Vox, el también ex ministro de Defensa señaló que “yo los cordones los veo más para los zapatos… A mí, como político, que no quiero ver a la extrema derecha ni en pintura, lo que creo es que hay que trabajar para que la extrema derecha no tenga tantos votos como tiene… Eso es mucho más importante que indignarse o lamentarse de los que tiene”.
Por todo ello, incidió en que “algo estaremos haciendo que es mejorable para que la extrema derecha tenga esos votos… Y lo que tenemos que hacer es intentar que tenga menos, que la gente normal no piense en votarles”.
Además, José Bono explicó que “en España no nos vendría nada mal intentar llegar a acuerdos entre el Partido Socialista y el Partido Popular, porque si no, los extremos van a crecer. Y bastantes experiencias negativas hemos tenido ya con los más radicales de Podemos cuando iban a asaltar los cielos y tenemos ahora con la extrema derecha en Vox”.
Por último, Bono concluyó asegurando que “yo quisiera más templanza para la vida política de mi país y más entendimiento entre las dos grandes fuerzas políticas, que son el Partido Socialista y el Partido Popular”.
Todo ello inscrito también en una conversación en la que el ex presidente de Castilla-La Mancha contó su presencia esta Semana Santa en Toledo, visitando la cofradía del Cristo Redentor, que este año cumple setenta y cinco años, “y que refleja perfectamente la austeridad de la Semana Santa toledana”.