La alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, ha presentado la modificación 32 del Plan General Municipal de Ordenación Urbana de Toledo que regula los apartamentos y viviendas de uso turístico.
La normativa seguirá el proceso administrativo habitual y se aprobará, previsiblemente, este jueves en la Comisión de Urbanismo.
Milagros Tolón ha explicado que esta normativa cumplirá con varios objetivos vitales para el Casco Histórico, ya que impide la especulación, fomenta la rehabilitación de viviendas para uso residencial, protege a los vecinos y vecinas del Casco Histórico, protege y apuesta por el comercio de proximidad, evita problemas de convivencia vecinal, y defiende un modelo sostenible desde el punto de vista turístico.
La normativa es fruto de la participación y del consenso y no tendrá carácter retroactivo, por lo que no afectará a las viviendas y apartamentos de uso turístico con licencias vigentes. “La participación ha sido clave durante el proceso, y es que la normativa es el resultado de la participación y de los informes de entidades e instituciones, así como de técnicos en la materia con los que venimos trabajando desde hace meses para llegar a esta regulación”, ha comentado la responsable municipal.
Tal y como ha indicado Milagros Tolón, impulsar esta normativa a partir de la modificación 32 Plan General Municipal de Ordenación Urbana “es la mejor fórmula jurídica dada la experiencia de otras ciudades” y establece medidas según la ubicación del apartamento o vivienda turística, ya sea en el Casco Histórico o en otros puntos de la ciudad.
No podrán superar el 20% de las viviendas
Dentro del Casco Histórico, las condiciones establecen que con carácter general el número de viviendas turísticas no podrá superar el 20 por ciento de las viviendas permitidas por el Plan General Municipal de Ordenación Urbana; además se establecen 11 zonas que se corresponden a los distritos censales existentes, en el marco de estas 11 áreas los apartamentos turísticos no podrán superar el 20 por ciento de las viviendas totales.
De esta forma, como ha señalado la alcaldesa, se evita la concentración de este tipo de viviendas en una misma zona del barrio antiguo.
Nuevas licencias
En cuanto a las nuevas licencias para la apertura de apartamentos turísticos y a tenor de la normativa presentada este martes sólo se concederán a aquellos pisos o apartamentos ubicados en la planta baja o primera planta de un edificio, y no se permitirá destinar un edificio en su totalidad a uso turístico, solo la planta baja y la primera planta, el resto de viviendas tienen que ser para uso residencial.
Además, si una planta baja se ubica en una zona catalogada como comercial por el Plan Especial del Casco Histórico no podrá destinarse a vivienda de uso turístico. “Evitamos la especulación y fomentamos la rehabilitación de viviendas para uso residencial en el Casco Histórico, además de proteger el comercio de proximidad que es tan importante”, ha dicho la alcaldesa.
Milagros Tolón ha estado acompañada por el gerente del Consorcio de la Ciudad de Toledo, Jesús Corroto; por el gerente de la Empresa Municipal del Suelo y la Vivienda, Luis Enrique Espinoza; por el director de la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas, Jesús Carrobles; por la presidenta de la asociación de comercios del Casco Histórico Distrito 1, Nuria Fernández; por la coordinadora de Asociaciones de Vecinos del Casco Histórico, Mari Luz Santos; y por los concejales de Urbanismo, José Pablo Sabrido, y de Fondos Europeos y presidente del Consejo de Participación del Casco Histórico-Azucaica, Francisco Rueda.
El Casco Histórico, prioridad del Gobierno local
“Para este equipo de Gobierno el Casco Histórico ha sido siempre una prioridad, este barrio confiere la principal identidad de Toledo, es Patrimonio de la Humanidad desde 1986, hay que respetarlo y conservarlo”, ha indicado la alcaldesa antes de comentar que el fenómeno de los apartamentos y viviendas turísticas no solo afecta a Toledo, sino a cualquier ciudad patrimonial, histórica y turística.
“En los últimos años las ciudades hacen frente a diversas amenazas que ponen en jaque su seña de identidad, como es el turismo masificado”, ha explicado, para añadir que desde el Gobierno local y junto a otras instituciones “hemos puesto en marcha un plan de revitalización que tiene como objetivo garantizar el carácter residencial del Casco Histórico y aumentar y fijar población, pues los vecinos son los que mantienen el pulso vital del barrio”.
De hecho, desde el equipo de Gobierno de la alcaldesa Milagros Tolón se han impulsado diferentes líneas de actuación y proyectos para la rehabilitación de viviendas a través del Consorcio, desde 2015 más de 1.000 viviendas rehabilitadas; para la regeneración urbana y recuperación de espacio públicos, como el Corral de Don Diego; para la recuperación de zonas verdes con plantaciones de árboles y arbustos, así como las líneas de apoyo al comercio de proximidad como las ayudas a la rehabilitación de locales comerciales o el despliegue de fibra óptica.
Consenso y participación
Por su parte, el gerente de la Empresa Municipal del Suelo y la Vivienda ha destacado que esta normativa ha contado con los datos de los diferentes informes realizados por el Observatorio de la Vivienda de Toledo sobre la evolución de viviendas y apartamentos turísticos. “Se ha buscado la solución idónea, preservar el uso residencial frente al turístico con una limitación estricta a los bloques o edificios completos”, ha comentado, para añadir que se incorporan medidas para la inspección y sanción con el fin de evitar el uso clandestino de viviendas con fines turísticos.
Desde el Consorcio de la Ciudad de Toledo Jesús Corroto ha recordado a quienes iniciaron junto a la alcaldesa Milagros Tolón este proyecto normativo, como son el arquitecto municipal Ignacio Álvarez Ahedo y el anterior gerente del Consorcio Manuel Santolaya, fallecidos. También ha indicado que esta normativa será referente a nivel estatal y supone un punto de inflexión para la revitalización del Casco Histórico.
Por último, desde la Real Academia se ha puesto en valor la normativa que como ha indicado Jesús Carrobles “es el resultado del consenso, no se prohíbe nada, se ordena y se distribuye. No hay vencedores ni vencidos, de alguna forma los vencedores son los vecinos que ya estaban sintiendo cierta presión por el uso turístico de apartamentos y viviendas. Es una buena noticia”.