El Gobierno de Castilla-La Mancha ha defendido su apuesta por los centros de la Mujer de la región como “la mejor herramienta con la que contamos para llevar la igualdad entre mujeres y hombres hasta el último rincón de la Comunidad Autónoma”.
Precisamente, para garantizar ese objetivo, el Ejecutivo autonómico ha destinado 1,6 millones de euros a los centros de la Mujer de Mora, Sonseca, Los Yébenes y Consuegra a lo largo de esta legislatura.
Así, lo ha manifestado esta mañana la directora del Instituto de la Mujer, Pilar Callado, en las XVIII Jornadas de Formación para Profesionales organizadas conjuntamente por esos cuatro centros, tituladas ‘La violencia de género a golpe de clic’ y en las que se han abordado cuestiones relacionadas con diferentes formas de ejercer la violencia a través de medios digitales.
La directora ha puesto en valor el trabajo de los centros y de las profesionales que trabajan en ellos, así como la gran implicación que han demostrado organizando unas jornadas de “tanta actualidad y en las que se aborda un tema de tanta relevancia en el mundo en el que vivimos como es la violencia digital o la ciberviolencia” y ha reconocido el empeño de los centros para continuar formándose y actualizándose permanentemente.
En relación al tema abordado en las jornadas, Pilar Callado ha afirmado, al igual que así lo reconocen otros organismos nacionales y europeos, que “la violencia digital es una extensión más de la violencia que se ejerce contra las mujeres por el simple hecho de serlo, con el único matiz de que emplea la tecnología para ejercerse”, por eso ha reivindicado la necesidad de que “ya que gran parte de nuestro día a día ocurre de manera online, es determinante garantizar que el espacio digital sea también un lugar seguro para las mujeres y niñas”.
Según datos de los últimos informes disponibles, las mujeres son las que en mayor medida sufren este tipo de violencia ejercida a través de medios digitales, muestra de ello es que una de cada diez mujeres a nivel europeo ha experimentado algún tipo de ciberviolencia antes de los 15 años.
Por otro lado, en España, más de un 25 por ciento de las mujeres entre 16 y 25 años ha recibido insinuaciones consideradas no apropiadas a través de redes y, además, en menos de una década, se han multiplicado por cinco los delitos de contacto mediante tecnología con fines sexuales con menores de 16 años.
Ante esta situación y frente a las devastadoras consecuencias y los enormes daños sociales y psicológicos de la ciberviolencia, Pilar Callado ha señalado que es necesario trabajar en la sensibilización y concienciación de toda la sociedad, sobre todo, “de las personas profesionales para que estén alerta y detecten a la mayor brevedad posible los casos; de las mujeres y las niñas para que sepan reconocer que la violencia que se ejerce a través de medios tecnológicos también es violencia y es un delito; y de las personas que componen la comunidad educativa, puesto que la educación en igualdad es la única herramienta para acabar con todo tipo de violencia contra las mujeres”.
En el desarrollo de las jornadas han estado también presentes la delegada de Igualdad en la provincia de Toledo, Nuria Cogolludo; el alcalde de Consuegra, José Manuel Quijorna; el alcalde de Los Yébenes, Jesús Pérez; el alcalde de Sonseca, Sergio Mora; la concejala de Bienestar Social del Ayuntamiento de Mora, Juana Valero; la concejala de Los Yébenes, María Carmen Salvador; y la concejala de Sonseca, Noelia Gómez.
En ellas han participado más de 60 profesionales de los centros de la Mujer, de servicios sociales, del ámbito educativo, de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y otras profesionales de los ámbitos jurídico, psicológico y laboral.
Centros de la Mujer de Castilla-La Mancha
A lo largo del año 2022, los centros de la Mujer de Mora, Sonseca, Los Yébenes y Consuegra han atendido a 750 mujeres y 2.800 consultas de diferentes tipologías (jurídicas, laborales, sociales, psicológicas).
Es por ello que la directora ha querido agradecer la encomiable labor de las 15 profesionales de esos centros, no solo por su atención directa a las mujeres, sino también por su implicación a nivel comunitario.