Así lo ha puesto de manifiesto el titular la sanidad castellanomanchego en una rueda de prensa en el Palacio de Fuensalida para dar cuenta de los acuerdos aprobados en el Consejo de Gobierno, junto a la consejera de Igualdad, Sara Simón.
Con la compra de este aparato, que supondrá una inversión de casi 8 millones de euros, se da "un paso más" porque la resonancia hace una exploración "más determinante, más fina y más específica" en cierto tipo de tumores.
"Es una inversión para la que se requiere también un tipo de obra concreta, que es lo que estamos haciendo ahora mismo en el Hospital de Toledo. Las paredes de plomo debe medir más de 4 milímetros. Es una instalación que tiene que dar el permiso el Consejo de Seguridad Nuclear y prevemos que para final de año estaremos funcionando con este nuevo PET/Resonancia en el Servicio de Medicina Nuclear del Hospital Universitario de Toledo", ha explicado Fernández Sanz.
Según ha recordado, el Gobierno de Emiliano García-Page decidió hace ya unos años que todas las provincias tuviesen medicina nuclear para el diagnóstico, principalmente del cáncer, porque "hasta que llegamos al Gobierno solamente existía este servicio en Ciudad Real de manera completa y un apéndice en Cuenca".
"Ahora ya está también en Toledo, ya está en Ciudad Real completo. Estamos instalándolo en Guadalajara, estamos instalándolo en Cuenca y estamos instalándolo en Albacete. Por lo tanto, las cinco provincias van a tener medicina nuclear", ha concluido el consejero.
