Agentes de la Guardia Civil, pertenecientes al Grupo de Delincuencia Organizada de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid y del Área de Patrimonio de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Toledo, en el marco de la operación “Habitat Luftikus”, han logrado detener a los integrantes de un grupo especializado en robar viviendas y cuya zona de acción comprendía las provincias de Madrid y Toledo.
A principios del mes de octubre del pasado año daba inicio el operativo del Grupo de Delincuencia Organizada tras detectar un incremento de denuncias en la Comunidad de Madrid en el que se detectó un patrón delincuencial. El examen realizado llevó a los especialistas en policía judicial a trabajar conjuntamente con sus homólogos de Toledo, al hallar hechos delictivos en varias poblaciones manchegas.
Modus operandi
La metodología utilizada por los autores de los hechos consistía en situar urbanizaciones de viviendas unifamiliares, seleccionando su objetivo. Para evitar que los propietarios estuvieran en el interior tocaban el timbre. Para acceder forzaban puertas o ventanas y sustraían todo tipo de efectos de valor, principalmente joyas y electrodomésticos.
Campañas de tres semanas en España
Si algo ha dificultado la operación ha sido que los individuos que materializaban los robos, permanecían dos o tres semanas en nuestro país. Llegaban a una vivienda y tras cometer varios robos se marchaban a otro país europeo, haciéndoles el relevo otros compatriotas que volvían a actuar de igual manera.
El grupo desmantelado operaba todos los días, cometiendo mínimo un robo con fuerza.
Los agentes lograron identificar a los organizadores del grupo y se lograba detener a cuatro varones de nacionalidad colombiana con edades comprendidas entre los 24 y 44 años de edad, quienes suman más de una veintena de detenciones por delitos contra el patrimonio.
Además se han realizado dos registros domiciliarios donde se han recuperado joyas, relojes, efectos de electrónica y telefonía móvil, además del vehículo empleado para cometer los hechos y numerosas herramientas.
Hasta el momento se ha logrado acreditar su implicación en robos acaecidos en Tres Cantos, Becerril de la Sierra, El Boalo, Soto del Real, Malpica del Tajo, Olías del Rey y Lominchar.