La percepción del inicio de la vejez no es igual para todos, los menores de 25 años lo sitúan en los 69 años, mientras que las personas entre 65 y 74 consideran que los 78 años marcan ese inicio. Lo que sí parece ser más coincidente es la inquietud por la salud y por el nivel económico.
El 30% de los castellanomanchegos afirma no pensar nunca en la vejez, el 10% lo hace frecuentemente y el 60% lo hace "alguna vez". Si bien la mayoría de los españoles considera indiscutible la importancia de cuidarse para llegar a la vejez con una mayor calidad de vida, también reconocen que el deterioro acaba siendo inevitable. En este marco, el informe de la Fundación Mutua de Propietarios desvela que las situaciones que más preocupan son tener problemas de movilidad (68%), padecer una enfermedad crónica (67%) y no disponer de dinero para vivir (59%). El estudio “Preocupaciones ante una próxima vejez” alerta de que un 44% de los castellanomanchegos mayores de 75 años tienen alguna dificultad para llegar a fin de mes con los ingresos del hogar, aunque sea ocasionalmente. De hecho, un 43% tiene dificultades para afrontar gastos imprevistos y un 42% no puede irse de vacaciones una semana.