En marzo de 1983 se creaba el Centro de Educación de Personas Adultas, que empezaba a impartir clase con solo tres profesores. En estas cuatro décadas muchas cosas han cambiado, el CEPA Francisco de Quevedo ha ampliado su oferta formativa, que va desde enseñanzas iniciales y conocimientos básicos hasta llegar a la prueba de acceso a Grado superior. A esto se suman una gran variedad de talleres, tres ejemplos muy diferentes serían cultura general, cine o competencias clave.
Ahora están inmersos en un cambio decisivo, la apuesta por la digitalización, y que, en opinión de su director, Juan José Álvarez, va a cambiar el método actual de la educación de adultos.
Álvarez recuerda que hablamos de educación pública, y por tanto gratuita, a la que puede acceder una amplísima franja de población. A partir de 16 años, para jóvenes que por trabajo no puedan cursar estudios de mañana en los institutos, y sin límite a partir de ahí. El alumno de mayor edad tiene 92 años.
Para celebrar estos 40 años de vida, esta tarde cuatro de los directores de la trayectoria del CEPA, una representación de los alumnos que han pasado por este centro desde su entrada en funcionamiento y el jefe de servicio de Enseñanza de Personas Adultas, Cecilio Amores, participarán en una charla-coloquio, que se celebrará en el salón de actos del Centro Cultural La Confianza de Valdepeñas.
Este acto servirá como punto de partida para la celebración de este aniversario.
En breve, el Centro de Educación de Adultos de Valdepeñas también dará otro paso importante para acercarse, de forma literal, a la ciudadanía. Este verano se hará el traslado a las nuevas instalaciones ubicadas en el Paseo de la Estación (antigua sede de MANSERJA), mucho más próximas al centro urbano, para empezar ya allí el próximo curso.