El notable incremento del número de fallecidos por siniestro vial durante 2022 en la autovía A-43, en especial el tramo comprendido entre Ciudad Real capital y Manzanares, en la confluencia con la A-4, que pasa de ningún fallecido el año anterior a siete víctimas mortales, lleva a la puesta en marcha de un plan operativo para que los usuarios tuvieran la sensación de una presencia policial casi permanente.
Con este fin el Subsector de Tráfico de la Guardia Civil ha realizado, durante el pasado año, más de 4 500 patrullas, practicado más de 5 000 pruebas de alcoholemia y 144 de drogas y se han formulado 1 660 denuncias por exceso de velocidad, además de otras infracciones.
Los resultados de estas labores de control y vigilancia han conseguido el objetivo que perseguían. El número de accidentes con víctimas se ha reducido en un 58%, con heridos en solo ocho de esos accidentes y ningún fallecido por esta causa en el tramo.
Cerca de un tercio de los accidentes se debieron a distracciones o desatenciones en la conducción por diversos factores y una gran mayoría se han producido en días laborables, predominando los lunes, jueves y viernes.
Para mantener y mejorar, en la medida de lo posible, esos resultados positivos la Guardia Civil avanza que seguirá trabajando en esta línea a lo largo de 2024 en ésta y en las demás carreteras ciudadrealeñas.