El Gobierno de Castilla-La Mancha ha decidido levantar la inmovilización del ganado decretada por los focos de viruela ovina en la región, con excepciones. Permanecen inmovilizadas cinco comarcas ganaderas, dos en nuestra provincia.
El consejero de Agricultura, Francisco Martínez Arroyo, ha explicado que es una decisión tomada "con toda la prudencia que recomiendan los técnicos" y que se hará efectiva a finales de la presente semana.
La inmovilización de ovejas y cabras se mantiene en las comarcas ganaderas de Tomelloso y Manzanares, son las más próximas a un posible foco, todavía no confirmado de forma oficial, en Alcázar de San Juan. Para el resto de las zonas de la provincia, incluido Valdepeñas, se abre las puertas para el movimiento de ganado. Una decisión muy esperada por los afectados que están sufriendo los sobrecostes que supone mantener en las explotaciones a los corderos, explica a Onda Cero el ganadero José García de Mateos.