Alrededor de un 4% de las exportaciones de vino desde nuestro territorio tiene como destino Estados Unidos, pero detrás de este pequeño porcentaje hay empresas del sector vitivinícola que llevan años realizando grandes esfuerzos e inversiones para llegar a mercados internacionales.
Por eso el presidente de la Denominación de Origen La Mancha, Carlos David Bonilla, espera que las declaraciones de Donald Trump sean un "globo sonda", una forma de presión para ver cómo reacciona el mercado europeo y confía en que la amenaza de imputar un arancel del 200% al vino no llegue a producirse.
Por su parte, el vicepresidente segundo de la Junta de Comunidades, José Manuel Caballero, ha calificado de locura y barbaridad la amenaza de Trump con los aranceles al vino. Aun así, ha enviado un mensaje de tranquilidad al sector vitivinícola de la región. Recuerda que Estados Unidos no es el principal mercado de los vinos de Castilla-La Mancha, a este país se exportan al año por valor de 18 o 20 millones de euros, y lo que se va a pedir a la Unión Europea son ayudas para la apertura del vino a nuevos mercados.
