No hay pistas sobre su posible paradero, aunque la Guardia Civil ha hecho un llamamiento a la ciudadanía porque piensa que los autores del robo pudieron deshacerse de ella tras quitarle las joyas.
El sacerdote Amadeo Puebla, descarta una búsqueda organizada y masiva por la falta de información y los peligros que puede suponer para las personas que se sumaran. Aunque tiene constancia de que quienes salen a pasear, hacer senderismo o cualquier otra actividad en el campo mira todo con otros ojos. "Puedes ir a dar un paseo por un lado u otro, incluso cambiar de ruta, pero no de forma masiva porque puede ser peligroso. La gente, de todas maneras, no va mirando la carretera, sino el borde por si pudiesen encontrarse algo".
El cura señala que el valor económico de esta pequeña talla es mínimo, pero sí mucha la devoción que siente la gente por la Virgen de las Virtudes. "Es la patrona de todo un pueblo, y además entran creyentes y no creyentes porque todo el mundo le tiene mucha devoción. Nos falta su presencia, es un hándicap importante para el pueblo, para nosotros y nuestra fe. Sabemos que su espíritu sí está, pero echamos de menos su imagen".
Los objetos recuperados por la Guardia Civil, en el marco de la investigación de este hecho delictivo, tampoco son valiosos. Sin embargo, la peluca, hecha con pelo natural a la medida de la imagen junto a unos dedos de la talla que se rompieron durante el robo, son lo único que tienen en estos momentos los santacruceños de su virgen.
