Recuerdan que el ganado viene sufriendo sucesivas enfermedades que han provocado la pérdida de muchos animales y el cierre de explotaciones, poniendo en riesgo el relevo generacional en este sector. El objetivo de esta asociación es defender el futuro de la ganadería y en este sentido lamentan la mala gestión que hacen las autoridades y la falta de representación que han tenido por parte de los dirigentes agrarios, como denuncia Julián Muñoz, ganadero de Campo de Criptana.
UGI tiene su sede principal en Valdepeñas y está abierta a todo tipo de ganadería. El presidente, José García de Mateos, ha dicho que tienden la mano al Gobierno de Castilla-La Mancha y no descarta mantener una reunión próximamente con la Consejería de Agricultura. García de Mateos ha manifestado que, igual que el sector vitivinícola recibe mucho dinero para su reestructuración y modernización, la ganadería también pide lo mismo.
El presidente de UGI, que ha negado que los ganaderos sean los culpables del incremento en el precio de la carne, ha reivindicado que las ayudas por la viruela ovina y caprina que Castilla-La Mancha abonará el próximo año lleguen a todos los afectados, no solo los de la "zona cero" sino también a los que se encontraban en las zonas restringidas.