Los cazadores han cargado contra las últimas decisiones de la Justicia que afirman "se ha plegado" ante el "lobby animalista".
Ellos exigen respeto y poder seguir con una actividad que da de comer a 8.000 familias en Castilla y León.
Además, recuerdan que si no se puede cazar, aumentarán los daños en los cultivos y en las carreteras: "cuando empecemos a tener problemas de verdad y haya vidas humanas en juego, entonces vamos a tener que salir corriendo a toda mecha para solucionar este problema. Esto que está sucediendo en Castilla y León es una barbaridad".
Mientras, en el hemiciclo todos los partidos menos Podemos e IU aprobaban el primer trámite de la ley que blindará la caza en la Comunidad.