La sorpresa para un grupo de madres y padres de una escuela infantil de León llegó el pasado jueves 5.
Ocho niños pequeños, alumnos del centro, eran expulsados de Manos Amigas sin previo aviso justo antes del Puente de la Constitución. ¿El motivo que recibieron? Que superaban el ratio permitido.
Este hecho levantó lo que parece haber detrás. Los ocho niños fueron propuestos anteriormente para un programa Montessori por tener altas capacidades pero la realidad, según denuncian los padres y madres afectados, es que a esos niños se les subía a un autobús a primera hora y se les llevaba a otro centro educativo.
De esta forma se evitaba que la Inspección de Educación de la Junta de Castilla y León viese que se superaba el ratio permitido de alumnos por aula.
La situación no se queda aquí, ya que aseguran que pagaban por el centro cuando no debería ser así, al existir una subvención de la Junta para que estos estudios sean gratuitos. Subvención que nunca llegó, según lamentan los madres y padres, que ya planean acudir a la justicia con esta cuestión.