El consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, ha firmado un protocolo de colaboración con el rector de la Universidad de Valladolid, Antonio Largo; el decano autonómico del Colegio de Ingenieros de Montes, Asier Saiz; el decano territorial del Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Forestales y Graduados en Ingeniería Forestal y del Medio Natural, José Antonio Gallegos, y el presidente de la Mesa Intersectorial de la Madera, Roberto Bravo, con el objetivo de establecer las bases de la colaboración para promocionar e impulsar la formación forestal universitaria en Castilla y León, en el marco de la gestión forestal sostenible. Se trata de incrementar las matriculaciones de nuevos alumnos en las titulaciones universitarias de las formaciones forestales de la Comunidad. “Este es un acuerdo en beneficio de todo el sector forestal de Castilla y León, porque desde la colaboración entre todas las partes implicadas conseguiremos motivar a nuestros jóvenes para dedicar su vida profesional al sector forestal, una actividad al alza en nuestra Comunidad, con nuevos retos y oportunidades que es preciso afrontar con cualificación profesional”, según ha destacado Suárez-Quiñones.
El ámbito de este protocolo firmado hoy en la Escuela Técnica Superior de Ingenierías Agrarias, en Palencia –en próximos días se suscribirá uno similar con la Universidad de León en el campus de Ponferrada– prevé las actuaciones oportunas para una mejor divulgación de las actividades forestales y de conservación del patrimonio natural y para la promoción de los estudios forestales universitarios.
A tal fin, el acuerdo establece los siguientes propósitos. En primer lugar, la divulgación de las actividades forestales y de conservación del patrimonio natural, a través del impulso y armonización de las estrategias de comunicación y organización de campañas de comunicación concretas sobre temas específicos; la preparación de materiales divulgativos (vídeos, folletos…); actividades de difusión del patrimonio natural y forestal y su impacto socioeconómico y ambiental, y organización de visitas guiadas a montes, espacios naturales e industrias de las diversas cadenas de valor del sector forestal, dirigidas a población en general y a públicos concretos, como estudiantes, jubilados, o asociaciones.
En segundo término, el protocolo firmado hoy prevé la promoción de los estudios forestales universitarios, impulsando sesiones de orientación profesional en institutos de educación secundaria y en centros de formación profesional para informar sobre las titulaciones forestales universitarias; potenciando y apoyando las campañas de divulgación que ya realizan la universidad y los colegios oficiales en medios de comunicación y en redes sociales, dirigidas a la incorporación de estudiantes en los títulos forestales universitarios; y promoviendo alianzas estratégicas conjuntas y/o en colaboración con empresas, organizaciones y resto de administraciones (diputaciones y ayuntamientos) para generar oportunidades de empleo para los egresados de titulaciones forestales y dotarlas de continuidad.
Dicho protocolo, que tendrá una vigencia de cuatro años con posibilidad de prórroga de hasta otros cuatro, prevé convenios de colaboración para concretar la participación (aportaciones, compromisos y prestaciones) de cada entidad firmante en los programas y acciones específicos que se desarrollen. Asimismo, está previsto constituir una comisión técnica de seguimiento paritaria, integrada por dos representantes de cada parte firmante y un secretario con voz, pero sin voto, designado por la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio. Este órgano se reunirá al menos una vez al año.
Justificación
La dinamización de las actividades del sector forestal en la Comunidad de Castilla y León, derivadas del impulso a la bioeconomía y de las acciones, públicas y privadas para avanzar en los Objetivos de Desarrollo Sostenible, acordados por Naciones Unidas en 2015, ha provocado una considerable demanda de profesionales forestales, tanto en el sector privado como en el sector público, que se ha hecho notar en el último quinquenio y en particular desde 2021.
Además, el incremento de la actividad económica tras la crisis provocada por la pandemia Covid y la Guerra de Ucrania, con los fondos europeos Next Generation UE, está repercutiendo directamente en el sector forestal.
En Castilla y León varios centros de formación universitaria ofrecen diferentes grados, tanto en la Universidad de Valladolid, a través de los campus de Palencia y de Soria, como en las Universidades de León, a través del campus de Ponferrada, y la Católica de Ávila.
Actualmente el nivel de empleabilidad de los títulos universitarios de ingeniería forestal y de montes se aproxima al 100 %. Sin embargo, se está detectando una carencia de titulados en el ámbito profesional, ya que la oferta empieza a no cubrir la demanda, debido al descenso de matriculaciones y de egresados en los últimos años. En las últimas dos décadas el número de matriculaciones en las universidades de Castilla y León ha descendido considerablemente.
Dado el enorme potencial del sector, y que éste y el medio natural, por extensión, presentan una creciente necesidad de estos profesionales –sobre la base de las futuras políticas de sostenibilidad, de biodiversidad, ambientales y de regulación del clima, promovidas por la Unión Europea, el Gobierno y las comunidades autónomas–, el decano en Castilla y León del Colegio Oficial de Ingenieros de Montes propuso en noviembre pasado a la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio organizar una campaña conjunta para promocionar los estudios forestales universitarios entre los jóvenes y apoyarla en un protocolo de colaboración, al que han acordado adherirse posteriormente el Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Forestales y Graduados en Ingeniería Forestal y del Medio Natural, las Universidades de Valladolid y de León, y la Mesa Intersectorial de la Madera de Castilla y León, en representación del sector.
Castilla y León, un territorio con grandes posibilidades en la conservación y gestión forestal
Castilla y León es un territorio marcadamente forestal. Más del 55 % del territorio es forestal; más del 40 % de sus municipios tienen más de la mitad de su suelo cubierto de bosques y otros terrenos forestales, y la Comunidad cuenta con más de cinco millones de hectáreas forestales, lo que la sitúa entre las regiones más forestales en la Unión Europea.
La Junta de Castilla y León apuesta desde hace años por la implantación y el desarrollo de la gestión forestal sostenible y por la recuperación de sus espacios forestales, lo que se refleja en una clara tendencia a la expansión de los bosques.
En Castilla y León el sector forestal manifiesta un considerable dinamismo y las perspectivas de consumo, de demanda y de comercio son muy favorables y pronostican un incremento de la actividad y la riqueza generada por el sector en las próximas décadas.
Sin embargo, a pesar de esas perspectivas de futuro, durante los últimos años, especialmente tras la puesta en marcha del proceso de Bolonia (Espacio Europeo de Educación Superior), se ha producido un descenso progresivo y continuado en la demanda de las titulaciones de Ingeniería Forestal o Superior de Montes en las universidades de Castilla y León, al igual que en la universidad española en general, por parte de los estudiantes.
“Para revertir esta tendencia y motivar a nuestros jóvenes a estudiar titulaciones universitarias de ingeniería forestal y de ingeniería de montes firmamos este convenio marco de colaboración, con el que armonizaremos las estrategias y campañas de comunicación”, ha señalado el consejero, "unificando mensajes precisos, motivadores, atractivos y atrayentes para los futuros universitarios”.
Asimismo, ha añadido Suárez-Quiñones, “impulsaremos sesiones de orientación profesional en institutos de educación secundaria y centros de formación profesional, y promoveremos alianzas con empresas, organizaciones y otras administraciones para generar oportunidades de empleo para los egresados de titulaciones forestales”.
Demanda de empleo forestal cualificado
El empleo forestal ha cambiado profundamente de condiciones en los últimos 30 años, cada vez se demanda personal con mayor cualificación profesional. El trabajo forestal, en el monte, está fuertemente condicionado por la estacionalidad de las tareas, la ubicación en lugares remotos, difícilmente accesibles, y por el modelo de organización de las actividades o modelo sectorial marcado por los montes de propiedad privada, de manera que la actividad depende en gran medida de la inversión y la financiación pública. La inversión pública es superior a la actividad económica privada, por lo que cuando la financiación pública se resiente es cuando más quedan al descubierto los problemas de esta forma de organización.
Sin embargo, los montes pueden proporcionar productos y servicios en mucha mayor medida de lo que vienen haciendo hasta ahora. A ello han contribuido en gran medida los esfuerzos inversores promovidos por la Comunidad en repoblación forestal desde hace varias décadas y una gestión cuidadosa que, además de la extensión de las superficies arboladas, ha favorecido la capitalización de los bosques.
Tradicionales y nuevas actividades en el sector forestal, aprovechando los fondos europeos
La Junta de Castilla y León apuesta por esos nuevos sectores de actividad. El ejemplo más llamativo es la biomasa, y en un futuro cercano la bioenergía, pero también por los productos forestales como la resina, la castaña, el piñón, o los hongos y la propia madera y los pastos. Y en cuanto a los servicios, son conocidas las posibilidades de la caza y de la pesca, del turismo de naturaleza, el turismo activo y otras actividades en la naturaleza. Mención especial merecen todas las tareas de extinción de incendios, mejoras forestales (repoblaciones y tratamientos selvícolas) y el aprovechamiento de recursos. Todos ofrecen nuevas oportunidades de empleo para los titulados universitarios forestales.
Además, los recursos forestales tienen la capacidad de generar una importante y valiosa industria de transformación, que en Castilla y León está muy desarrollada y equilibrada. Por ello la Junta aprobó en 2014 el Programa de Movilización de Recursos Forestales 2014-2022.
“Aprovecharemos el impulso de los fondos europeos Next Generation UE (más de 100 millones de euros) para mejorar el estado de la biodiversidad y la resistencia y adaptabilidad de nuestros bosques”, ha señalado el consejero, “preparándolos para enfrentar los retos climáticos y para ser aprovechados de forma sostenible y eficiente, los que genera nuevas perspectivas de empleo”.
A este respecto, Suárez-Quiñones ha añadido que “necesitamos cada vez más profesionales universitarios forestales bien formados para desarrollar el nuevo modelo de gestión del patrimonio natural de la Comunidad que sirva de tractor para la revitalización de nuestras áreas rurales forestales”. Todo ello justifica el acuerdo firmado hoy en Palencia “en beneficio de todo el sector forestal de la Comunidad”, concluyó el consejero.