El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha corregido este lunes al vicepresidente de la Junta y dirigente autonómico de Vox, Juan García-Gallardo, y ha reiterado que las medidas sanitarias para prevenir abortos en la Comunidad no serán obligatorias para los médicos.
No se obligará a los médicos ni a las mujeres
En una declaración institucional sin preguntas de la prensa, en la que ha insistido en que las anunciadas el pasado jueves tras el Consejo de Gobierno son medidas de ámbito sanitario, centradas en el fomento de la natalidad en una Comunidad "con evidentes problemas de despoblación".
El Gobierno requiere oficialmente a la Junta de Castilla y León para que no aplique el protocolo contra el aborto
Las palabras del vicepresidente de la Junta se producen después de un fin de semana con explicaciones contradictorias en el Gobierno autonómico.
Vox destacaba los cambios en el protocolo y desde la Consejería de Sanidad, en manos del PP, apuntaron en primera instancia que no habría ninguna modificación. Un extremo que corrigieron el viernes, dando por hecho la aplicación del plan antiaborto.
Mañueco trató de despejar la polémica y señaló que no había ningún tipo de coacción o quebranto de derechos, en alusión a las críticas del Ejecutivo de Pedro Sánchez. "La Junta de Castilla y León no ha aprobado acuerdo alguno que limite los derechos de las mujeres ni de los profesionales sanitarios", publicó en su cuenta de Twitter.
Ante ello el Gobierno realizó un requerimiento oficial a la Consejería de Sanidad de Castilla y León avisándole de que se abstuviera de aprobar o aplicar medida alguna que vulnere la actual normativa con respecto a la interrupción voluntaria del embarazo y le advirtió de su disposición a más acciones legales.
El Ejecutivo ha informado de este requerimiento en un comunicado ante los protocolos anunciados por la Junta de Castilla y León para evitar abortos.
El requerimiento del Gobierno
Gallardo insiste en que el protocolo antiaborto es obligatorio
El vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, reitera que como protocolo sanitario es de obligado cumplimiento para los profesionales, no así para las mujeres que podrán decidir si quieren o no someterse a él.
Niega que existan grietas entre PP y VOX en el ejecutivo regional por esta cuestión y acusa al Gobierno de Pedro Sánchez de sobreactuar con su requerimiento y de querer tapar así las consecuencias de la "Ley del sólo sí es sí".
García-Gallardo ha cifrado en 2.500 niños los que dejan de nacer cada año en Castilla y León y añade que se trata de proteger a las mujeres, no de lo contrario. También defendió que es la comunidad donde más ayudas se ofrecen a la maternidad y puso a Hungría como ejemplo de estas políticas, un país, recalcó, de la Unión Europea que va como un "tiro".
Isabel Rodríguez, sobre el protocolo del aborto: "Despacharse en una rueda de prensa sobre este asunto es preocupante"
La portavoz del Gobierno y ministra de Política Territorial, Isabel Rodríguez, se ha pronunciado en Más de Uno sobre el polémico protocolo sobre el aborto anunciado por el vicepresidente del Gobierno de Castilla y León, Juan García Gallardo, de Vox, y señala que "lo que se propone la Junta es interferir en la voluntad de la mujer de manera que condiciona su decisión".
Isabel Rodríguez ha insistido en que el Gobierno quiere evitar que se vulneren los requisitos que recoge la ley y ha recordado que el Tribunal Constitucional ha señalado también la importancia de no interferir en la decisión de la mujer. Por ello ha sido tajante al decir que "no vamos a tolerar ni un sólo paso atrás en los derechos de las mujeres".