Las vacas de Castilla y León vuelven a tener las mismas medidas de control que las de otras comunidades para erradicar la tuberculosis bovina y podrán volver a salir de la Comunidad, tras publicarse este miércoles el auto judicial que suspende la orden de la Junta que relajaba ese saneamiento, que provocó que el Ministerio prohibiera a las reses dejar esa autonomía.
El Boletín Oficial de la Comunidad publica este miércoles el auto del Tribunal Superior de Justicia autonómico del lunes que suspendió la relajación de las medidas de saneamiento bovino de la Consejería de Agricultura que devinieron en una orden ministerial que prohibía a las reses salir de la Comunidad y que ahora decae.
Qué es lo que pasó
La Consejería de Agricultura, Ganadería y Ordenación del Territorio, en manos de Vox, emitió una orden antes de las elecciones del 28 de mayo para flexibilizar las medidas de control y erradicación de la tuberculosis.
El Ministerio de Agricultura reaccionó con la publicación el 26 de mayo de una orden ministerial que impidió a las vacas de Castilla y León, excepto las de Burgos, León y Valladolid, poder abandonar la comunidad con el objetivo de preservar la sanidad animal en España ya que, según el Gobierno, la Orden de la Junta vulneraba la normativa comunitaria en lo que respecta a la erradicación obligatoria de la tuberculosis bovina en todo el territorio comunitario, lo que podía afectar a la reputación de la carne de esta Comunidad en mercados exteriores.
Por ello, el Ministerio interpuso un recurso contencioso-administrativo contra la Orden de la Junta ante el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, que ayer le dio la razón en un auto en el que suspendía esa orden autonómica e instaba a recuperar la situación previa a la publicación de dicha orden el 15 de mayo, es decir, a devolver los controles de saneamiento a como estaban antes, sin relajarlos.
El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Gerardo Dueñas, ha afirmado en una rueda de prensa que la Junta no renunciará a relajar las medidas de saneamiento ganadero, como el control de la tuberculosis bovina, y ha fiado a poder flexibilizarlas cuando "un nuevo Gobierno" tras el 23 de julio lo vea "con otros ojos". Ha añadido que en este asunto, se ha "llevado muy al extremo la salud pública": "No podemos matar a todas las vacas para controlar la tuberculosis", ha dicho.
El enfado de los ganaderos
Esta gestión del saneamiento ha generado tensión y desconcierto entre los ganaderos de la Comunidad, que el lunes se manifestaron en Salamanca en una protesta que se saldó con un detenido y once heridos, todos ellos miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, después de que los manifestantes usaran vallas a modo de ariete y bastones en su intento de entrar en la sede de la Delegación de la Junta en Salamanca.
Las imágenes de centenares de personas intentando entrar por la fuerza en la sede de la Junta de Castilla y León en Salamanca representan el episodio más grave de un conflicto que se venía avivando en las últimas semanas entre ganaderos, veterinarios y políticos por las medidas de control de la tuberculosis bovina.
Ayer mismo la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural convocó una reunión este martes "para hablar", pero Unión por la Ganadería, la plataforma que agrupa a 22 asociaciones salmantinas, ha rechazado el encuentro mientras no les ofrezcan cambios en los protocolos que establece la normativa europea y estatal.
"¿Para qué queremos una reunión si no tienen nada que ofrecernos? ¿Una reunión como las 100 anteriores? Seguiremos con los actos de protesta hasta que nos ofrezcan soluciones alternativas, tenemos los mismos protocolos desde hace 40 años", ha explicado el portavoz de la organización, Juan Luis Delgado.
Qué pide el sector
Los ganaderos piden que se modifiquen los protocolos de este saneamiento y la prueba que se le hace a sus vacas porque entienden que no es 100 % precisa y, por precaución, se envían al matadero reses que después resultan estar sanas en un segundo análisis.
Primero el ahora presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco (PP), cuando era candidato en 2019, y ahora Vox, al frente de la Consejería de Agricultura y Ganadería, prometieron a los ganaderos flexibilizar esas medidas, lo que se concretó recientemente en una orden antes de las elecciones del 28M, pero el Gobierno central, avalado el lunes por el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, se lo ha impedido.
El vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo (Vox), se reunió el 26 de mayo con ganaderos salmantinos en Vitigudino para decirles que ese jueves había estado en Bruselas "defendiendo al sector frente a las imposiciones arbitrarias del reglamento de 2020 en materia de tuberculosis bovina".
Tras el intento de los ganaderos de entrar por la fuerza en la sede de la Junta en Salamanca, ni Vox ni Gallardo se han pronunciado al respecto, tampoco en las redes sociales donde suelen hablar del saneamiento de la tuberculosis como algo "que ahoga" a los trabajadores del campo, aunque la Junta, a través de su portavoz, Carlos Fernández Carriedo (PP), ha mantenido que pretenden seguir con la aspiración de la flexibilización dentro de la legalidad.
Tensión entre ganaderos y veterinarios
El portavoz de Unión por la Ganadería señaló el lunes directamente al Sindicato de Veterinarios de Castilla y León SIVECAL como uno de los colectivos que están "azuzando que se siga maltratando al ganadero".
En declaraciones a EFE, el presidente del SIVECAL, Manuel Martínez, ha dicho: "No estamos azuzando nada, lo único que hemos hecho es publicar un informe detallado de todas las irregularidades que tenía la resolución de la Junta (la que flexibilizaba los protocolos y tumbó la Justicia)".
Añade que "siempre hemos estado del lado de los ganaderos y lo seguiremos estando. Somos los primeros interesados en que se mejoren estas pruebas, no son infalibles como ninguna lo es, pero si hay dudas es como con el covid, de forma preventiva intentas no contagiar a quienes viven contigo".
Boicot a los saneamientos y la paralización de las ferias
Los ganaderos denuncian que les perjudica no sólo que les maten vacas que luego están sanas, sino también que "cuando sale positivo un animal, te prohíben el movimiento del resto de tus animales tanto al cebadero como a pasto", explica Jesús María, un ganadero que estaba en la protesta en la Junta y prefiere no dar su apellido por la tensión que se vive en el sector.
"Están poniendo en pie de guerra al ganadero, con esto cada vez hay gente más caliente, lo de ayer salió en los medios y es la única manera por desgracia", ha apuntado este ganadero que se declara "apolítico", que ha cambiado su voto "tres veces" en los últimos tiempos y que rechaza que se les identifique con un partido político.
Unión por la Ganadería, ante la "impotencia" que les trasladó el lunes la Junta, anuncia que boicotearán los saneamientos a partir del 12 de junio, movilizando a gente para que no puedan realizarse, y también paralizarán las ferias de la provincia, incluida la importante feria de Salamanca en septiembre.
