En una comparecencia ante la Comisión de Salud del Parlament para dar cuenta de su gestión en relación al brote de enterovirus tras las críticas de la opinión pública, el conseller de Salud, Toni Comín, ha argumentado el retraso como una estrategia para no generar alarma.
Toni Comín, que ha comparecido a petición propia y de algunos grupos parlamentarios, ha defendido su gestión ante el brote: "Supimos identificar la situación de riesgo desde el primer momento".
Según él, el 6 de mayo, cuando se produjo la alerta asistencial, se envió el protocolo utilizado en el Hospital Vall d'Hebron de Barcelona a toda la red hospitalaria, pero el envío a los CAP no se produjo hasta el 13 de mayo.
Comín ha asegurado que la diferencia temporal del envío fue deliberada porque entendía que era muy importante poder dar respuestas y no generar alarma: "La medicina no responde de forma improvisada, el análisis científico necesita tiempo", ha justificado.
Sin embargo, se transmitió la información al teléfono del Sistema de Emergencias Médicas (SEM) 061 del CatSalut Respon también el 6 de mayo.