LA SIGNATURA

El adiós De Alba

El cambio de guardia, el relevo de los últimos capitanes del Barcelona, es una auténtica realidad.

Alfredo Martínez

Catalunya | 25.05.2023 11:56

El anuncio ayer del adiós de Jordi Alba unido a la salida de Piqué y Busquets representa un cambio total en la fisonomía del vestuario del Barcelona. Ya no quedará ninguno de los carismáticos jugadores de la generación laureada.

Es una ruptura definitiva con la época gloriosa de los grandes títulos y la caída a los infiernos en Europa. Pero jalonada de muchos títulos a nivel internacional y nacional por un grupo de futbolistas altamente competitivo.

El inexorable paso del tiempo hace que se cumpla y es ley de vida la retirada de estos futbolistas que tienen una edad alta para competir en la élite de equipos de altísimo nivel. No sabemos si Jordi Alba todavía tendría un gran rendimiento una temporada más pues, de hecho cuando ha jugado esta campaña ha cumplido con las expectativas y ha estado a la altura de las circunstancias complementándose con Alejandro Balde perfectamente en la demarcación de lateral izquierdo a lo largo de la campaña.

Pero de la misma forma que Busquets abandonó el club en el momento oportuno, También parece que es una situación similar para la de Jordi Alba. Otra temporada con poco protagonismo en el equipo y muchas suplencias y banquillo hubiera sido difícil de llevar para un jugador acostumbrado. Tener muchísimo protagonismo, a ser titular y participar mucho más en el juego.

Amén de ser un jugador de enorme carácter, y que en cualquier caso podría haber llevado mal esa situación.

Económicamente al Barcelona le alivia la situación de la marcha de salarios tan altos como el de Pique, Busquets, Griezmann y el propio Alba. Vamos a ver si es suficiente para conseguir el FairPlay financiero necesario como para armar una gran plantilla la temporada que viene, que es el objetivo.

Jordi Alba siempre tuvo una relación de amor odio con alguna parte de la afición del Barcelona, pero es innegable que pasar a la historia, sino como el mejor lateral izquierdo de la historia del Barça, como lo es para muchos y si no cerca del mejor para todos. 18 títulos en 11 temporadas lo dicen absolutamente todo un futbolista campeón, con un carácter ganador.

Su fuerte carácter le hizo competitivo, pero también le generó muchos enemigos y problemas, pero en la hora del Adiós hay que poner en la balanza más cosas positivas y despedirle el próximo fin de semana ante el Mallorca, como se merece, como uno de los últimos grandes campeones del Barcelona.