La del malbaratamiento alimentario es una crisis de la que se habla muy poco y en la que es urgente intervenir. Esto lo tienen claro profesionales y autoridades de todo el mundo. De hecho, según datos oficiales, en la Unión Europea cada año se descartan 88 millones de toneladas de comida, lo que supone un coste de 143 billones de euros, una cantidad que equivale al 20% de la producción alimentaria global. Y por eso muchos países impulsan campañas de concienciación, como es el caso de la Generalitat de Catalunya, que desde hace años impulsa una campaña para concienciar sobre el malbaratamiento de comida.
'Aprofitem els aliments'
En 'La Ciutat' hemos conocido la campaña y hemos comentado estos datos con Joan Godia, director general de Empresas Agroalimentarias, Calidad y Gastronomia: "Tenemos datos sobre Catalunya, pero son de hace unos años. Se hablaba de 35 kilos de media desperdiciados en la parte final de la cadena. Estos datos los estamos actualizando para ver cómo se produce esta pérdida y en unas semanas tendremos datos referentes a Catalunya, pero lo que queremos es concienciar de forma global a toda la sociedad, por eso también preferimos hablar de cifras más generales, que además impactan más y sirven para concienciar. Una tercera parte de los alimentos se pierden o malbaratan, esto supone el 8% de los gases de efecto invernadero. Con el agua que se destina a producir este malbaratamiento son 450 kms cúbicos de agua, que equivale al volumen de agua que lleva el rio Bolga, es una barbaridad. De hecho, sólo reduciendo un 25% del malbaratamiento que está habiendo acabaríamos con la desnutrición, así que es un problema de todos y tenemos que intentar reducirlo todos".Sobre la campaña 'Aprofitem els aliments', Godia explica que "se divide en varias acciones, la primera las comidas Gastro Recups, donde participan más de 50 restaurantes de toda Catalunya. Este año estamos en más de 50 establecimientos, con menús específicos a partir de alimentos recuperados, es decir alimentos que están en perfectas condiciones para su consumo pero han sido descartados. Esto empieza hoy, pero además haremos una gran comida en Girona y el cuarto Maratón de Espigoladors, todo para sensibilizar sobre la pérdida de alimento".
Godia se muestra muy satisfecho de la evolución de la campaña en cuanto a visibilidad y apoyo: "Estamos teniendo buena acogida, cada año hay más locales adheridos a la campaña, y además con las espigoladas se trata de que la gente vaya y haga de altavoz a otras personas y consigamos reducir estas cifras. Una espigolada es ir a los campos a coger alimento que ha sido descartado. Este alimento se distribuye a asociaciones o personas que no tienen tanto acceso a la comida".
Ojos que descartan, corazón que no siente
Joan Godia tiene claro que el descartar alimentos por su aspecto tiene un gran impacto: "El hecho de descartar alimentos que pueden no entrar por los ojos pero que se descartan tiene gran parte de responsabilidad en todas estas cifras dramáticas. En el mundo cada vez hay más gente a alimentar, y ante esto tienes dos opciones: Aumentar la productividad, lo que comporta gastar suministros, y la otra es luchar contra el desperdicio de comida, y en eso estamos, porque es la opción más sensata y que tenemos más a mano".
Godia ha dejado claro que lo ideal sería llegar al malbaratamiento 0, hoy en día casi imposible, pero asegura que "se tendría que reducir el 50% del malbaratamiento de alimento, y aquí en Catalunya queremos llegar a esta cifra".