Es evidente que el Barcelona atraviesa uno de esos baches que se producen a lo largo de la temporada con mayor o menor duración en los altibajos que tiene siempre un campeonato y que normalmente se producen un par de veces por temporada.
Es imposible mantener el mismo nivel de regularidad a lo largo del año y cuando coinciden una serie de circunstancias, se produce un bajón en el juego que normalmente también provoca malos resultados .
En el caso del Barcelona incluso se ha llegado decir que hay épocas del año en las que su rendimiento es muy inferior y otras en las que es casi imparable.
¿ Y a qué puede ser debido este bache que atraviesa ahora el equipo de Xavi Hernandez? Por supuesto que no es un solo motivo el que provoca el bajón de juego y de resultados del equipo.
Debe influir, y ya lo hemos comentado las lesiones y hombres importantes como Pedri y Frenkie de Jong que no solo no han estado presentes y son los timones del equipo, sino que han obligado a que prácticamente el resto de los centrocampistas sanos, a que los otros jugadores acumularon muchos minutos, sin rotaciones, sin refrescos, acabando también más desgastados de lo habitual en estos calendarios Tan intensos. Lo uno lleva el otro.
También la pérdida de confianza del equipo que se debió producir después de la derrota ante el Real Madrid a pesar de haber jugado un gran partido.
Esas cosas mentalmente generan dudas en el colectivo porque a pesar de ser un buen encuentro se pierden los puntos.
También hay un problema de fútbol, el Barcelona estuvo sometido a la Real Sociedad durante casi 60 minutos y eso es un concepto de mala colocación y de mala lectura del partido, ya que los donostiarras tuvieron la pelota durante casi todo el encuentro y superaron con claridad al Barcelona. El único consuelo que queda en este caso es destacar que los de Imanol Alguacil son un equipo en un estado de forma extraordinario y que ayer bailaron al Benfica y que demuestran que no son flor de un día.
Los jugadores tampoco han acabado de rendir al nivel que cabría esperar y muchos de ellos han dado un pequeño bajón o incluso no han recuperado su nivel tras la vuelta de la lesión.
Es el caso de los Lewandowski y Raphinha que aún no han aportado mucho y llevan casi un mes y medio fuera de los terrenos de juego o con un rendimiento bajo como los Joaos.
Por tanto es multifactorial, nunca es una razón la que produce una caída tan importante como la que está sufriendo el Barcelona que por suerte es reversible. De momento nada se ha perdido. Es más, aún depende de sí mismo para ser primero de grupo y el único coste será el económico de no haber conseguido la victoria en Hamburgo ante Shakthar, 2,8 millones, que no es poca cosa.
En liga aún queda mucho por recuperar y está claro que el parón de selecciones de la próxima semana tras el partido frente al Alavés, va a ser un alivio importante para que el equipo coja aire, reflexione, recupere , cargue, pilas y pueda afrontar a partir de ahí lo que queda hasta el parón de Navidades, enderezando el rumbo y poniendo otra vez al equipo al nivel que le corresponde por categoría de Club y de futbolistas.