Tras el funeral, que se ha oficiado en el tanatorio de Sancho de Ávila de Barcelona, el coche fúnebre del antiguo propietario del Bar Pinocho, Juan Bayén, conocido como Juanito, ha pasado por delante del Mercado de la Boquería de Barcelona. En la puerta del mercado, familiares, comerciantes y ciudadanos han podido despedirse de él mientras ha sonado su canción favorita, "Barcelona", de Freddie Mercury y Montserrat Caballé. En el acto ha intervenido otro paradista histórico, Eduard Soley, que ha recordado la "sonrisa" de Juanito y ha reivindicado su papel para que la Boquería sea conocida en todo el mundo.
Más homenajes
Desde este miércoles y hasta el viernes, el Espai Boqueria se ha convertido también en un lugar de culto ya que se ha colocado una gran fotografía y 88 rosas blancas en recuerdo del camarero más famosos del emblemático bar Pinotxo. Además, el próximo 3 de mayo se presentará la figura de Juan Bayén en el Nuevo Museo de Cera de Barcelona, obra que fue encargada hace seis meses por la Asociación de Comerciantes del mercado.
Trifulca familiar por el "Pinotxo"
La muerte de Juan Bayén se ha producido unos días después del polémico traspaso del emblemático bar. Parece ser que el antiguo propietario lo hizo de forma unilateral sin tener en cuenta que la mitad del negocio familiar era de su sobrino, Jordi Asín Bayén. Mientras el caso se resuelve por la vía judicial, de momento el nuevo propietario ha retirado el rótulo con el nombre de "Pinocho" y tampoco puede utilizar esta marca. Por su parte, Bayén, a través de sus abogados, ha explicado en un comunicado, ya póstumo, que su sobrino le había maltrato y había preparado una estrategia para secuestrar el negocio.
