Ahora, Casa Leopoldo vuelve a abrir sus puertas gracias al matrimonio formado por Sofía Matarazzo y Bruno Balbás. Ambos quieren recuperar la tradición, la cultura y, por supuesto, la deliciosa gastronomía. Han reformado el local manteniendo su esencia y también han reformado la carta. El objetivo principal es ofrecer una cocina de mercado y asequible.
Dos reservados muy especiales
En esta nueva etapa, Casa Leopoldo ha reformado dos de sus espacios para dedicarlos a dos personas muy importantes. Uno de los reservados lleva el nombre de su propietaria histórica, que es Rosa Gil. El otro lleva el nombre de Manuel Vázquez Montalbán, el escritor que pasó horas y horas en el restaurante con sus mejores amigos divagando sobre lo divino y lo humano.