Estos últimos días de abril ha habido lluvias, con días especialmente intensos, algo que le va muy bien a Catalunya después de muchas semanas sin llover y de la llegada de la fase de emergencia por sequía. Y falta por llegar el verano, que si es como el de los últimos años vendrá marcado por la falta de lluvias y el calor. Y por extensión, los incendios. Por esto Catalunya se está preparando para poder combatirlos con más recursos y facilidades que estos últimos años.
Campaña inédita
El gobierno de la Generalitat de Catalunya se ha puesto manos a la obra y este año ha redoblado esfuerzos para dotar al Cuerpo de Bomberos y los técnicos forestales las herramientas para prevenir y combatir mejor los incendios que en años anteriores. De esta manera, se han iniciado intervenciones en las zonas boscosas, con especial atención a las más sensibles, como es el caso del Parc de Collserola.
Como nos contaba la directora de Bosques del departamento de Acció Climàtica de la Generalitat, Anna Sanitjas, "el objetivo es preparar Collserola para los incendios, que los bomberos tengan más recursos y facilidades a la hora de hacer su trabajo, más accesibilidad a la hora de actuar. Esta campaña se lleva a cabo en bosques con mucho árbol. Estamos desbrozando el bosque y talando los árboles que provocan saturación en algunas zonas".
Cualquiera podría pensar que se trata simplemente de cortafuegos, aunque no es así: "No viene a ser un cortafuegos, porque se entiende como una zona más amplia sin árboles, simplemente son pequeños corredores para evitar que el fuego de propague en caso de incendio. Se talan árboles y se arreglan las copas que puedan provocar contacto de una zona a otra. Los caminos que se abren y se limpian también facilitan la circulación de camiones de bomberos" explica.
Paso adelante necesario
Sin duda, Catalunya ha sido estos últimos años una de las comunidades más azotadas por los incendios. Ante esta situación, Sanitjas se congratula de que "lo que hacía falta era dar un paso más, y es lo que se está haciendo. La prevención ya se estaba llevando a cabo estos últimos años, pero se ha dado un paso adelante más, también en inversión. Y se ha hecho en el momento más necesario, ya que estamos pasando una de las peores épocas en cuanto a sequía, sino la peor".
Adaptarse a los cambios
Es evidente que ha habido cambios en el medioambiente y el clima en los últimos años. Por eso, los cuerpos de Bomberos y de técnicos especialistas que se dedican a mantener y prevenir de incendios a los bosques han "tenido que reinventarnos, ya que el cambio climático lo ha cambiado todo. Los incendios son más virulentos que antes, y la sequía no ayuda para nada, así que los especialistas hemos tenido que exprimir nuestro conocimiento para diseñar campañas como esta y sobretodo adaptarnos a todos estos cambios, que cada vez son más bruscos", analiza Sanitjas.
A la hora de mirar hacia los próximos meses, Sanitjas lamenta que "es difícil hacer una previsión sobre qué tenemos que esperar en verano, porque estamos a merced de una climatología que no controlamos. Lo que sí es seguro es que necesitamos que llueva, al menos de vez en cuando, porque que no llueva en todo el verano aumenta mucho el riesgo de incendio y la dificultad a la hora de apagarlos".