SOCIEDAD

Los festivales y la eterna lucha vecinal

Vecinos del Forum y de la parte del barrio del Poble Sec más cercana a la Fira Montjuic y el Poble Espanyol vuelven un año más a mostrar su rechazo ante el ruido que producen los macrofestivales de música, que impiden a estos vecinos descansar y hacer vida normal en casa durante cuatro días. En 'La Ciutat' hemos hablado con el presidente de la PACAME (Plataforma d'Afectats per la Contaminació Acústica i la Massificació d'Esdeveniments), Jordi Andolz.

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Gerard Sanz

Barcelona |

Este fin de semana se ha celebrado el Primavera Sound en el Forum de Barcelona, donde se han concentrado hasta 268.000 personas para disfrutar de conciertos durante tres días. Es el primero de los muchos grandes festivales que se celebran en Barcelona a lo largo del verano y sirve para dar el pistoletazo de salida a la temporada. Al Forum aún le falta por acoger el Cruïlla en el próximo mes de julio, mientras que la Fira Montjuic acogerá el Sonar Day, la versión diurna de un Sonar que tendrá lugar, como los último años, en la Fira Gran Via de L'Hospitalet. También el Poble Espanyol y otros equipamientos de la ciudad acogerán, a lo largo de los próximos cuatro meses, varios festivales que le dan mucho ambiente y colorido a la ciudad, que dejan dinero en el sector hotelero y hostelero... pero que suponen una gran molestia para los ciudadanos que viven cerca de estas zonas.

Un sinvivir de 96 horas

Es el caso de los vecinos tanto del Forum como del Poble Sec, en la parte más cercana a la Fira Montjuic y el Poble Espanyol. Los vecinos del Forum ya han podido comprobar (y sufrir) este fin de semana el gran ruido del Primavera Sound y ahora le toca el turno al Sonar, que en un par de semanas invadirá la zona de la avenida Maria Cristina y, seguramente, generará molestias al vecindario como cada año. Estos vecinos de la zona contigua a la Fira de Montjuic estan representados por la PACAME (Plataforma d'Afectats per la Contaminació Acústica i la Massificació d'Esdeveniments) y en La Ciutat hemos hablado con su presidente, Jordi Andolz, que ha confirmado que "afecta mucho en el no poder dormir o descansar, al final tampoco puedes tener vida en tu propia casa, con música a unos decibelios que están muy sobrepasados. No hay control para garantizar el descanso de los vecinos o el poder hacer vida normal, es un derecho fundamental que el Ayuntamiento y las administraciones tienen la obligación de garantizar", reclama Andolz.

Saturación de festivales

Tal y como anticipa Andolz, "en un par de semanas se celebra el Sonar Day en la Fira de Montjuic, pero no es sólo el Sonar Day, también se organiza, en el Poble Espanyol, el Off Sonar, una especie de Sonar de pequeño formato que también se hace de noche, como el Sonar. Con todo esto tenemos que de 15.00h a 23.00h está el Sonar Day en Fira Montjuic y de 20.00h a 07.00h el Off Sonar en el Pobre Espanyol, que en una de sus partes exteriores ya da a zonas residenciales. Son cuatro días con música 24 horas, que quizás hay quien piense que no es para tanto, pero seguramente es porque no lo ha comprobado, porque la molestia es brutal", explica el president de la PACAME.

Además, Andolz recuerda que "no sólo se trata de molestia en cuanto al día a día, hay gente enferma que se está medicando y que a sus problemas tiene que añadirle el no poder descansar, lo que en ocasiones complica cualquier dolencia. Hay algunas personas que tienen la suerte de tener segunda residencia y se van de casa cuando hay festivales, pero otros vecinos no tenemos la oportunidad de hacerlo y nos vemos obligados a aguantar todo esto".

Sin esperanzas

Preguntado por si los vecinos que protestan por el ruido tienen la esperanza de poder dejar de protestar algún día porque se ha encontrado una solución, Andolz es claro: "Ni una mínima esperanza. Nos hemos reunido en ocasiones con el Ayuntamiento y las administraciones, pero viendo que su prioridad es la de vender Barcelona como una ciudad de festivales y que se puede llegar a un festival en metro cuesta pensar que ahora empezarán a proponer el reubicar los festivales o buscar una solución", lamenta Andolz.

Una solución que podría pasar por "una reducción del número de festivales que se celebran en Barcelona, que es una barbaridad, controlar los horarios y controlar también los decibelios, sobretodo los bajos, que es lo que genera más molestia y no se está regulando. Hay gente de fuera de Barcelona que escucha perfectamente los conciertos, y esto no puede ser. Hay personas que han medido los decibelios en el marco de su ventana y les marca 78-79 decibelios, es un sinsentido".

Andolz, a todo esto, deja claro que "no estamos pidiendo que acaben los festivales, ni mucho menos, pero tiene que haber un control, hay que regular las molestias que provocan. Un día, durante un rato, puedes aguantar escuchar música que no quieres escuchar, pero durante cuatro días casi las 24 horas es insufrible", denuncia Andolz.