AL SIGNATURA

Si es una final

No hemos llegado ni al mes de diciembre, no hemos cumplido ni un tercio de la competición y ya nos vemos obligados a utilizar calificativos importantes y darle trascendencia a partidos que no deberían tenerla o por lo menos de tanta magnitud.

Alfredo Martínez

Catalunya | 28.11.2023 08:56

Pero las dudas generadas por el Barcelona en las últimas semanas y el traspiés en Alemania frente al Shakhtar colocan el partido frente al Oporto en una situación casi límite a los Blaugrana para evitar los fantasmas de una crisis prematura y complicarse el camino en Europa como ocurriera en temporadas pasadas.

Uno no debe ponerse en lo peor pero una derrota frente a Oporto dejaría un panorama poco claro para la última jornada y una situación delicadísima por tercer año, consecutivo en la liga de campeones, en la que este año, si el Barcelona no puede fallar, ni decepcionar a sus aficionados, tras los dos fracasos anteriores.

Todo ello añadido al bajo rendimiento del equipo en las últimas semanas que se ha ido acentuando y confirmando con malos resultados que reflejan claramente que se están viviendo un bache de juego, y de confianza. La mejor lectura de todo ello es que a pesar de importante va a cheque que arrastra ya varias semanas, el equipo de Xavi Hernandez, no hay nada perdido, es más las diferencias no son solo absolutamente salvables sino escasas con lo mucho que queda por jugar e incluso en Europa.

El panorama es factible porque el Barcelona depende de sí mismo y en condiciones normales debería conseguir la clasificación como primero a poco, que cumpla las mínimas expectativas. Pero es todo lo que rodea el equipo, la inseguridad que se ha generado con el poco fútbol que ha ofrecido en estas últimas semanas y las dudas que genera de que dé una respuesta firmeza en un partido de esta magnitud. Insisto en que posiblemente ante las adversidades y los mayores retos y desafíos es cuando se ve la mejor versión de los protagonistas, y quizás sea esta la gran oportunidad que tenga muchos de los jugadores del Barça, de reivindicarse y ofrecer su mejor versión o esa para la cual se les trajo al club.

Es por tanto fundamental en este día en el que se anuncia frío o temperaturas más frescas en el estadio olímpico, que la afición vuelva a volcarse con el equipo cuando más le necesita y ayude a conseguir el gran objetivo común que es no solo clasificarse, sino hacerlo como primero de grupo. Xavi está obligado a tocar la tecla y definitivamente hacer que este equipo juegue el fútbol que todos esperan, con la vuelta de Frenckie de Jong y la presencia prácticamente de todos los internacionales y titulares excepciones, hecha de Gavi, al que desde aquí deseamos una rápida recuperación de la operación en el día de hoy, no hay excusas que valgan para no ofrecer la mejor cara y dar una alegría a una afición que lleva mucho tiempo huérfana de ellas y que necesita empezar a ilusionarse para esta todavía larga temporada.