El presidente del Parlament de Cataluña, Josep Rull, celebrará desde mañana martes la ronda de contactos con los grupos parlamentarios para convocar después el debate de investidura de Salvador Illa como presidente de la Generalitat.
Desde el Parlament confirmaron el sábado que Illa había comunicado por la mañana a Rull su "voluntad" de someterse a un debate de investidura al considerar que cuenta con los apoyos necesarios para ser investido presidente de la Generalitat de Cataluña.
Lo hizo antes de comunicarlo también a la dirección del PSC, reunida de forma extraordinaria tras dar el viernes la militancia de ERC su aval al preacuerdo entre ambos partidos.
La intención de Rull es celebrar esta ronda de contactos presencialmente este martes, empezando por el PSC y siguiendo con los grupos que han manifestado su intención de apoyar a Illa, es decir, ERC y los Comuns. A continuación irían los demás grupos parlamentarios.
Inicialmente, la ronda de contactos iba a comenzar este lunes pero ERC solicitó retrasar su celebración hasta el martes, dando que las juventudes del partido independentista deciden esta tarde si respaldan o no la investidura de Salvador Illa.
Puigdemont podría volver a Cataluña esta semana para la investidura de Illa
El expresidente catalán y diputado de Junts, Carles Puigdemont, podría regresar si cumple con su compromiso de estar presente en el debate de investidura tras más de siete años en el extranjero, aunque podría ser detenido a su llegada, ya que a él no se le ha aplicado todavía la ley de amnistía.
De hecho, el sábado anterior, en un acto celebrado en el sur de Francia para que él pudiera estar presente de manera presencial, dejó claro en su discurso que él tiene "la obligación" de ir al Parlament si hay investidura y comentó que "muchas" personas le habían mostrado su "preocupación" por si le detenían a su regreso.
El Tribunal Supremo señaló que no ve amnistiable la malversación de caudales públicos en la causa del 'procés', delito por el que se encuentra procesado Puigdemont, por lo que se mantiene activa la orden nacional de captura contra él. Por ello, si el expresidente catalán vuelve en los próximos días podría ser detenido.