La escasez de lluvias está provocando una sequía generalizada en todo el país que, por el momento, ha obligado a restringir el consumo de agua a 6 millones de ciudadanos en Cataluña. Ahora, el Parlament ha aprobado una nueva ley de sequía impulsada por Junts per Catalunya y por el PSC, que sustituye a la del Gobierno catalán.
La proposición de ley, que contempla 500 millones de euros para crear infraestructuras o una partida de 50 millones para los ayuntamientos, ha contado además con el voto a favor de Esquerra, Ciudadanos y el PP. Y, el presidente catalán Pere Aragonés defendía que la sequía debe dejarse fuera del electoralismo y la precampaña.
Ayudas para los ayuntamientos
El texto, consensuado con el PSC y ERC, congela las multas a los ayuntamientos que superen los límites de consumo de agua. La nueva ley da a los consistorios un mes de margen para solicitar las ayudas de ahorro y mejora de la Generalitat, una vez estén convocadas.
Construcción de desalinizadoras
Otra de los aspectos que recoge el documento es sobre inversiones. Se destinará una partida extraordinaria para obras y actuaciones urgentes. Y también se contempla construir una desalinizadora en Cubellas y ampliar la de Tordera.