LA SIGNATURA

Presidente Piquè

La retirada futbolística de Gerard Pique supondrá la aparición de un nuevo e importante personaje en el entorno del fútbol club Barcelona con altavoces muy importantes y reflexiones que tendrán mucho calado. Empieza la etapa del Pique presidenciable.

Alfredo Martínez

Catalunya | 10.11.2022 10:50

Ya ayer apareció por primera vez públicamente para empezar a lanzar sus mensajes y su punto de vista demostrando que posiblemente vaya hacer mucho ruido en los próximos tiempos en algunos casos a favor de la actual junta directiva con la que no termino muy bien y en otros siendo un crítico muy peligroso.

Pues en el entorno del Barcelona no habido siempre mucho ruido ahora se añade una persona muy activa y con mucha repercusión en sus manifestaciones lo cual va a generar a buen seguro, multitud de polémicas.

Piqué eso sí dejó entrever que de momento su candidatura a ser presidente está muy verde y que primero habrá de ir realizando otra serie de cosas, desconectar del fútbol y descansar pues no en vano lleva 16 años en la élite del fútbol profesional con todo el desgaste que ello conlleva.

Es evidente que estaríamos hablando de un nuevo tipo de presidente al estilo de Beckenbauer en Alemania y desde luego poco conocido en España a excepción hecha de Urrutia en el Athlétic de Bilbao o del actual presidente de la Real Federación española de fútbol Rubiales que sucedió al también ex futbolista Villar.

Creo que nadie pone en duda la preparación de Pique y el nivel intelectual. Siempre se ha dicho que es un tipo con un coeficiente intelectual elevado, inteligente, y vivo para los negocios.

Todo ello que es muy a favor de él no quiere decir que te garantice ser un gran presidente, ni siquiera el conocer tan adentro el mundo del fútbol, pero desde luego tiene mucho ganado.

Los que parece que también podemos ganar somos los medios de comunicación y las expectativas que genera un tipo de la incontinencia verbal del central de la Bonanova.

Los próximos años para Laporta van a ser de sigilo y de sensación de estar vigilado y para el resto de candidatos como Víctor Font de que ha irrumpido un enemigo verdaderamente muy peligroso con mucho poder mediático, amistades, influencias y contactos futbolísticos.

Lo que está claro es que en Barcelona nunca se aburre uno y por si fuéramos pocos parió la abuela, con el Pique presidenciable.