GENTE VIAJERA CATALUNYA

Ruta por la ‘Barcelona curiosa’

En Gente Viajera Catalunya con Carles Lamelo entrevistamos a Joan de Déu Prats, autor de la ‘Guía curiosa de Barcelona’ [audio en catalán].

Carles Lamelo

catalunya | 20.05.2023 11:03

El periodista Joan de Déu Prats nos cuenta alguna de las curiosidades de Barcelona en su último libro en el que da respuesta a preguntas como: ¿Por qué los taxis son amarillos y negros? ¿Por qué hay palomas en Barcelona? ¿Dónde está la quinta forca? ¿Por qué hay un avión en el Tibidabo? ¿Desde cuándo se encienden los semáforos?

Barcelona es un destino turístico y cultural de renombre mundial. Con una historia rica y fascinante que abarca más de 2.000 años, la ciudad ha sido testigo de la influencia de diversas culturas y civilizaciones a lo largo de los siglos. Desde su fundación como una colonia romana hasta convertirse en un importante centro cultural y artístico en la actualidad, Barcelona ha dejado una huella imborrable en la historia de Europa y en la imaginación de millones de personas.

Fundación e influencia romana

Barcelona tiene sus raíces en la época romana, cuando fue fundada en el siglo I a.C. con el nombre de "Barcino". Los romanos establecieron una próspera colonia en el lugar, aprovechando su posición estratégica en el Mediterráneo occidental. Los restos arqueológicos de esta época, como las murallas romanas y los restos del antiguo templo de Augusto, aún se pueden encontrar en el Barrio Gótico de la ciudad.

La era medieval y el esplendor gótico

Durante la Edad Media, Barcelona floreció como un importante centro comercial y cultural. En el siglo XIII, se convirtió en la capital del Reino de Aragón y fue sede de la Casa de Barcelona, una de las dinastías más poderosas de Europa en ese momento. La ciudad experimentó una expansión significativa durante este período, y muchos de sus edificios emblemáticos, como la Catedral de Barcelona y la Iglesia de Santa María del Mar, fueron construidos en estilo gótico.

El legado de la arquitectura modernista

A finales del siglo XIX y principios del XX, Barcelona se convirtió en un epicentro del modernismo, un movimiento artístico y arquitectónico que dejó una marca duradera en la ciudad. El arquitecto Antoni Gaudí se convirtió en el máximo exponente del modernismo catalán, y sus obras maestras, como la Sagrada Familia, el Parque Güell y la Casa Batlló, son visitadas por millones de personas cada año. Estas estructuras únicas y extravagantes son emblemáticas de la identidad de Barcelona.

Barcelona en el siglo XX

Durante el siglo XX, Barcelona experimentó grandes cambios y desafíos. La ciudad fue sede de la Exposición Internacional de 1929, que impulsó el desarrollo urbano y dejó un legado arquitectónico importante, como la Fuente Mágica de Montjuïc y el Pabellón Alemán diseñado por Ludwig Mies van der Rohe. Sin embargo, la Guerra Civil Española y el posterior régimen franquista tuvieron un impacto significativo en la ciudad y restringieron su desarrollo.

El renacimiento contemporáneo

Después de la muerte de Franco y la transición a la democracia, Barcelona experimentó un renacimiento cultural y económico. Los Juegos Olímpicos de 1992 fueron un hito importante que impulsó la regeneración urbana y la transformación de la ciudad en un destino turístico de primer nivel.