Es evidente que Hansi Flick ha aterrizado perfectamente en el Barcelona y ha comenzado ofreciendo unos magníficos resultados y sensaciones. Todo le ha salido perfecto en estos tres primeros meses desde que firmara con el equipo catalán y jugará los primeros partidos oficiales. Buen juego, buenas sensaciones, apuesta por la cantera, ninguna excusa y asumiendo como hombre de club, todo lo que le viene desde la entidad. Hasta aquí todo parece perfecto, idílico con el entrenador alemán, pues todo marcha viento en popa y a toda vela. Falta por comprobar que ocurrirá cuando las cosas vengan torcidas, cuando el entorno apriete o los resultados sean adversos. Entonces debemos calibrar la templanza del entrenador alemán y su dominio de las situaciones complicadas.
Y todo ello viene a colación de unas manifestaciones del presidente Laporta, en la rueda de prensa de ayer, que sonaron a claraa indirecta hacia Xavi, cuando comentó que la actual entrenador asumía lo que tenía y que no buscaba excusas.
No debemos ser injustos con Xavi y su paso por el Barcelona , y desde luego no estar comparando permanentemente con la gestión que vaya hacer el entrenador alemán durante el tiempo que dirija al Barcelona. Cada momento y cada época tienen una situación distinta y unos condicionantes que ayudan o perjudican o que marcan el devenir de los resultados.
La etapa de Xavi ya es pasada, totalmente pasada, y referenciarse constantemente en lo que hizo el técnico catalán, no parece lo más acertado. Hay que empezar a mirar hacia delante y crear una nueva era y un nuevo ciclo con Flick como comandante. Xavi tuvo muchas cosas buenas y otras no tanto y desde luego vivió una época tan complicada como la que le está tocando vivir al actual entrenador. Ganó una liga brillantemente y mantuvo la filosofía de apuesta por la cantera. Si bien es verdad que su último año fue más decepcionante que positivo. en líneas generales, hay que agradecerle al Tecnico Vallesano su gestión al frente de la entidad, dejando un puesto cómodo en Qatar y arriesgando buena parte de su nombre y prestigio en los banquillos. Y sobre todo quedarse con lo positivo que tuvo en esa época. De la misma manera que ahora da la sensación de que estamos juzgando con buenos ojos y muy positivamente todo lo que hace Flick. Todo nos parece bien Cuando hace cuatro días al ser vapuleado en el trofeo Joan Gamper por el Mónaco, algunos ponían el grito en el cielo y empezaban a dudar si realmente el entrenador alemán era la apuesta adecuada para dirigir al Barcelona . Dejemos a Xavi en paz y miremos hacia el futuro y quedémonos siempre con lo mejor de cada etapa, y sobre todo disfrutemos del buen momento que vive ahora en Barcelona Líder incontestable en un arranque ilusionante y prometedor.