Según ha informado en rueda de prensa el responsable de Renfe en Cataluña, Félix Martín, en estos momentos hay dos trenes parados, uno en Riells, al norte de Barcelona, con 150 pasajeros, y otro en Gelida, con 350 viajeros a bordo.
Martín ha asegurado que la prioridad es dar atención a los viajeros y acercar los trenes a las estaciones más próximas, mientras están dedicando "todos los recursos disponibles" para solucionar el problema.
En principio, para los usuarios que viajan desde Madrid se habilitarán autobuses para que continúen su desplazamiento por carretera desde Camp de Tarragona, según han explicado fuentes de Renfe.
En el otro sentido, los viajeros deberán cambiar de tren en Figueras (Gerona) para seguir su trayecto por la línea convencional de ferrocarril Figueras-Villafranca-Barcelona.
La incidencia ha provocado que los trenes AVE y Alvia que circulaban por la línea de alta velocidad Madrid-Barcelona-Frontera Francesa fueran desviados a las estaciones.
Fuentes de Adif ha explicado que, poco después de las siete de la mañana, se detectó una incidencia que afectaba a los sistema de señalización y control de los convoyes y que se decidió detener el tráfico por motivos de seguridad.
Según publica Adif en su cuenta de Twitter se ha interrumpido el servicio entre Camp de Tarragona-Figueres-Vilafant de alta velocidad por un intento de robo de cable de fibra óptica en ambos sentidos.