La víctima habría ido a casa de uno de los presuntos agresores con un grupo de personas después de una fiesta y otro de los encarcelados habría intimado con ella.
Los dos habrían ido a un dormitorio y unos minutos después entró otro de los acusados de agresión sexual.
Fue entonces cuando se habrían cometido las agresiones, a las que poco después se habría añadido el tercer presunto agresor.
La víctima, según El Diario de Tarragona, manifestó en reiteradas ocasiones su negativa a participar y pidió que la dejaran hasta el punto de que dos de los jóvenes se habrían acabado marchando de la habitación.
El tercero, según la denuncia, continuó agrediéndola.
Fue una amiga de ella la que entró a la habitación y consiguió sacarla del piso. Posteriormente, la joven denunció los hechos a los Mossos d'Esquadra.