Así lo explica en una nota de prensa la Concejalía de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento, cuya titular, Inés Sabanés, afirma que "los colegios no tienen de qué preocuparse, ni las familias, porque el acceso va a estar garantizado".
"Las autorizaciones puntuales las gestionarán los centros en función de sus necesidades y el sistema es flexible", dice la delegada, y precisa en la nota que "si un día la persona que se encarga de llevar a los niños al colegio es diferente a la habitual tampoco tendrán problema". "Este sistema da autonomía porque no está sujeto a horarios fijos y se adapta a cada caso y a cada necesidad", dice la concejala de Medio Ambiente y Movilidad.
Y añade que para el próximo año el Ayuntamiento ya está estudiando soluciones para que también tengan el acceso garantizado, "siempre de la forma más sostenible posible". Según Inés Sabanés, la mayoría de los niños y niñas alumnos de los colegios del centro "acuden a sus centros en transporte público o caminando por la almendra central".
Las familias cuyos hijos estudian en colegios del centro de la capital han manifestado su preocupación ante los problemas que supuestamente les acarreará la puesta en marcha de la APR Madrid Central, que desde el 23 de noviembre próximo cerrará las calles del centro de la ciudad al tráfico privado, con algunas excepciones.