La pareja llevaba meses preparando la muerte de María José, grabaron incluso un vídeo en el que ella le confirma por última vez su deseo de morir.
Llevaba media vida sufriendo esclerosis múltiple y ya era completamente dependiente de su marido que según el presidente de la asociación derecho a morir dignamente, Javier Velasco, no tenía otra alternativa.
Para el médico Jacinto Batiz, de la organización médica colegial, antes de la muerte hay otras opciones.
Ángel se enfrenta a un delito de inducción al suicidio penado con entre 6 años y 10, aunque la petición expresa de un enfermo grave reduciría la pena de 6 meses a dos años.
El mismo detenido llamó a los servicios de emergencias desde su domicilio en el distrito de Moncloa y confesó que le había suministrado una sustancia letal a su mujer de 61 años que llevaba desde los 32 aquejada de esclerosis múltiple y desde hacía 10 era completamente dependiente de su marido, ni siquiera podía mover las manos
Ella, había expresado en varias ocasiones y públicamente su deseo de morir, incluso nos ha contado el presidente de la Asociación Derecho a Morir Dignamente, Javier Velasco que había intentado suicidarse antes, pero ahora no había otra alternativa, necesitaba la ayuda de su pareja
El hombre, conocido por reclamar en el Congreso la aprobación de la Ley de Eutanasia, se enfrenta a una acusación de homicidio por inducir al suicidio que estaría castigada con una pena de entre 6 y 10 años, sin embargo, el código penal también contempla una pena inferior por ser un homicidio compasivo…
Desde la Asociación de Muerte Digna han emitido un comunicado en el que aseguran que en ninguna otra cuestión hay tanta distancia entre los deseos de la ciudadanía y la legislación como en el de la regulación de la muerte asistida. Más del 80% de la población está a favor de despenalizar la eutanasia y el suicidio asistido. Sin embargo, el artículo 143 del Código Penal sigue castigándola con penas de prisión.