Billete mundialista que los 'Hispanos' tenían perdido a falta de catorce minutos para la conclusión con los seis goles de desventaja (21-15) con los que llegaron a contar los de Jordi Ribera, que en el momento más complicado sacaron a relucir el carácter competitivo que les ha convertido en los últimos tiempos en candidatos a las medallas en todos los grandes campeonatos.
Un carácter irreductible que se reflejó en una formidable defensa donde brilló con luz propia el joven pivote Javi Rodríguez, que en su primer partido 'grande' con los 'Hispanos' demostró el porqué de su condición como una de las grandes promesas del balonmano español. Mejoría que permitió a España reconducir la situación con un parcial 0-4 en los siguientes seis minutos que permitió a los de Jordi Ribera situarse a tan sólo dos tantos (21-19) a ocho minutos para la conclusión.
Pero ni así se libró del sufrimiento el equipo español que entró en el último minuto y medio de juego con un desventaja de tres goles (25-22) y un jugador menos por la exclusión de Dani Dujshebaev. Toda una prueba de fuego para España que pese a la amenaza de pasivo logró hacer llegar el balón al extremo Dani Fernández que se topó con un extraordinario Dejan Milosavljev, empeñado en amargar la tarde al conjunto español.
Una parada que otorgó a Serbia la posibilidad de forzar la prórroga en un último ataque en el que Gonzalo Pérez de Vargas adivinó las intenciones de Milos Kos y detuvo el lanzamiento del lateral serbio sellando definitivamente la presencia de los 'Hispanos' en el próximo Mundial.
