Fue hace 42 años, en el 78, cuando el gremio de pasteleros decidió crear un dulce en honor a la virgen, que además también es su patrona, y sacó un concurso para ver qué se inventaban y ganó un señor de Vallecas llamado Pedro Blanco. Aunque es parecido al Roscón de Reyes, es diferente, de entrada porque sólo se elabora en Madrid. Además, la receta hace que, salvo el parecido de la forma de rosca y de qué se rellene, cambie por completo. La decoración de la parte superior en el caso de la corona, es con crema, y no con las frutas escarchadas del roscón, no lleva agua de azahar tan característico, si no que lleva zumo de naranja, y su sabor es más tipo suizo. El relleno típico es de crema, aunque ya se hacen de otros sabores como nata y trufa. Además no lleva sorpresa, así que el que la paga, la paga sin opción de que lo haga otro.
Nos vamos a comprarla primero al Barrio de las Letras, a la calle del Pozo, a la pastelería más antigua de Madrid, con 200 años a sus espaldas. Hablo de la Antigua Pastelería El Pozo, donde elaboran de crema y chocolate y, por supuesto, 100% artesanal.
De aquí nos vamos cerquita, a Casa Mira, otra pastelería clásica, en la Carrera de San Jerónimo, que es la primera tienda artesanal de turrones en Madrid, con lo cual podemos ir a comprar nuestra corona y ya de paso por si no tenemos suficiente dulce con esto, ir aprovisionando nuestra despensa para las navidades. Las hacen en dos tamaños, de ¼ y de medio kilo, también de crema y chocolate.
En Ferraz tenemos otra pastelería perdición que te hace querer llevarte todo lo que allí venden, La Oriental. Las elaboran en 3 tamaños, cuarto, medio y un kilo y las rellenan de nata, crema, trufa, dulce de leche y cabello de ángel. Además cuentan con un amplio surtido de productos sin gluten y las coronas también las preparan para que los celiacos no se queden con la miel (o la corona) en los labios. Lo mejor, encargarlas para no quedarte sin ellas.
La mítica Viena Capellanes es bien conocida desde 1873 y tienen más de 20 tiendas en Madrid por lo que será muy fácil conseguir la corona en cualquiera de sus direcciones. Tienen de 500 gr a 16,40€ y también las tienes individuales por 3,20 €. De trufa, nata y crema. Las de nata las recubren con azúcar glass y con cobertura de chocolate las de choco.
Oriol Balaguer adquirió La Duquesita en Fernando VI cuando cerró, para no perder esta joya de 1914. Mantiene la decoración de cuando se inauguró y cualquiera de elaboraciones es alta pastelería a precios asequibles. Preparan la Corona de la Almudena con diferentes rellenos en un solo tamaño de 250 gramos, de nata, de nata y fresas, de vainilla, o incluso de masa de chocolate bañada en chocolate.
¡Feliz y dulce Día de la Almudena!
