"Pá comerse Madrid" con Isabel Aires

Tomates muy castizos

Nueva temporada de "Pá comerse Madrid" en Onda Cero, con propuestas de producto de Km 0, de origen, de proximidad, para fomentar la economía local, ayudar a los pequeños productores, donde también ayudaremos al medio ambiente reduciendo el transporte al estar más cerca, tomaremos productos de temporada que estarán en sus momento óptimo, y que suelen llevar menos tratamientos y conservantes. En definitiva, conoceremos con el paladar las maravillas que tenemos en los 4 puntos cardinales de nuestra comunidad. Y hoy, como no podía ser de otra manera, para empezar y ya que estamos en temporada, y con lo que me gusta a mí, hablaremos de tomates que saben a tomate. Porque yo ahora los tengo de mi huerto, pero claro, quiero que todos disfrutéis también.

Isabel Aires

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En Madrid tenemos como 16 variedades de tomates englobados en categorías como son los hombros verdes, los tomates gordos, los tipo pera, los picudos y los morunos, y ya de ahí salen varias subvariedades, a cual más rica. Y de lo primero que tengo que hablar ya que hay que darles la enhorabuena es de IMIDRA, el Instituto Madrileño de Investigación y Desarrollo Rural, Agrario y Alimentario por la labor que hacen habitualmente y en especial este año, ya que en la finca La Isla, que tienen en Arganda del Rey, los investigadores han estudiado la evolución de las tres variedades de tomate recuperadas en la región como son moruno, gordo y antiguo, de las cuales donaron a 3 agricultores madrileños para que las plantaran en total unos 12.000 plantones utilizando un sistema de cultivo al aire libre, sostenible y respetuoso con el medio ambiente y que ahora están en su máximo esplendor. Se pueden comprar en los centros Alcampo.

Y ya que estamos en Arganda, nos vamos a ir cerquita y camino de Chinchón a Huertos Vega del Tajuña, donde si los probáis, veréis que son como si comierais un ‘entrecot de tierra’, porque no les falta ni carnosidad ni un potente sabor. Los cultivan unos chicos que se están dejando la piel en el campo, y que se encargan hasta de criar ellos mismos las lombrices con el que elaborar el compost para fertilizar. Una pasada, porque su dedicación es increíble y hacen que salgan los tomates que salen, claro… Los llevan a domicilio, con otras verduras además que cultivan, y podéis tener la opción de que os lo lleven a domicilio ¡o hasta podéis alquilar vuestro propio huerto!

Otra dirección donde comprar estupendos tomates es en El Colmado del Tomate, donde ya su nombre te dice lo que puedes encontrar en esta tienda. Está en la calle Santa Bárbara y su propietario, el incombustible pamplonés Igor Lorenzo Iturbide, te embelesa cuando vas a comprar contándote sobre las maravillas y bondades de un buen tomate. Y las dos primeras cosas que te dice y con las que sienta cátedra porque estoy 100% de acuerdo es que “no te fíes de un tomate que brille mucho” y “los más feos son los que más ricos están”.

Él además del tomate moruno de Patones y el de Aranjuez o el corazón de buey, trae variedades de productores de Barbastro, Rioja, Granada y Tudela, y tiene algunos con nombres tan peculiares como el cherokee o semilla japonesa. Sin duda ir a comprar a este colmado es una experiencia ya no sólo por lo que te vas a llevar a casa si no por lo que vas a aprender comparando las diferentes variedades que tienen.

Este verano os hablaba de restaurantes con huerto o al revés, huertos con restaurantes como era el caso de La Huerta de Carabaña, que este año habían puesto en pleno huerto un restaurante efímero. Además de esta experiencia de disfrutarlos in situ, siempre podemos pedirlos a domicilio en su página web (https://huertadecarabana.es/tienda/) y hacer la compra no sólo de tomates si no del resto de verduras y frutas que cosechan en Carabaña. Lechugas, berenjenas, calabacines, judías verdes y mucho más nos llegan a la puerta con sus variedades de tomates moruno y rosa. Y para ir a comerlos si lo que queremos es salir fuera de casa, hay varias direcciones que no podemos perdernos…

Ya sabes que yo soy fan nº 1 de Ponzano, en Ponzano 12 (https://restauranteponzano.com/) donde miman y cuidan el producto y con esto de los tomates no iba a ser menos. Ahora se los compran a los chicos de Huertos Vega del Tajuña y con un poquito de sal, un buen virgen extra y cebolleta, tenemos un entrante espectacular.

Otro lugar imprescindible en Madrid, al lado de Padre Damián, es El Qüenco de Pepa (https://quencodepepa.com/) donde la incombustible Pepa Muñoz junto a su socia Mila, con la valiosa ayuda de su hortelano José, tienen una huerta en la provincia de Ávila donde siembran pensando en sus clientes, con 3 ingredientes básicos como son tierra, agua y buenas semillas, sin absolutamente nada de pesticidas. Es habitual encontrarte unos grandes tomates a la entrada del restaurante ya que entre borraja, calabacines, puerros, cebollas, etc, el tomate se ha convertido en su producto estrella. Porque miman el producto desde el origen. Lo puedes pedir con sal y aceite picual, con cebolleta, con ventresca o con burrata. Además, a la vuelta del local han abierto una tienda donde se pueden comprar sus productos para seguir disfrutando en casa.

Y nos vamos a un clásico del buen producto también como es Angelita Madrid (https://madrid-angelita.es/es/experiencia/) en la calle La Reina donde los hermanos Mario y David Villalón han montado un templo del buen comer y sobre todo del buen beber porque tienen unas 500 referencias del vino que armonizan a la perfección con todo su producto. Los tomates que usan son del huerto ecológico de su padre, y son un espectáculo. Les sirven para hacer tanto el pisto que es uno de sus platos estrella, y que sólo para reducir el tomate utilizan 6 horas, así como para disfrutar del tomate en crudo.