Una escultura del rey Juan Carlos I ha aparecido junto a la famoso monumento de 'El Oso y El Madroño' de la Puerta del Sol de Madrid. La estatua del rey emérito porta un rifle de cara apuntando hasta el monumento.
La obra artística mide un total de 170 centímetros y está hecha de poliuretano y masa de modelar, además fue colocada sin permiso de las autoridades y después de estar en Sol, ahora viaja para ser expuesta en una exposición que el artista tiene en el centro cultural 'La Parcería', en Arganzuela.
La obra busca "ridiculizar la figura del monarca"
La escultura es obra del artista chileno, Nicolás Miranda, y busca "ridiculizar la figura del monarca" y se titula 'Estrategias parasitarias para la sobrevivencia en un mundo cruel".
Además, hace referencia a las conocidas prácticas de caza que Juan Carlos I llevó a cabo en África, concretamente en la que hizo en abril de 2012, cuando se destaparon esos viajes por un accidente en el que tuvo que ser operado tras tener una caída y romperse la cadera mientras cazaba elefantes en Bostwana.
La obra será expuesta en la Asociación Cultural 'La Parcería' que señala que Miranda "entiende la visualidad como un tipo de lenguaje, y en consecuencia, como un sistema combinatorio de signos dispuestos a ser apropiados y manipulados para releer el entorno que nos contiene", recoge en un post de Instagram.
Esta escultura coincide justamente con al polémica visita de Juan Carlos I a España en la que no ha estado en Madrid y tampoco ha visitado a su hijo, el rey Felipe VI, ni a sus nietas en Zarzuela, como ya ha hecho en otras ocasiones desde su exilio a Abu Dabi.