Las diferentes tendencias alimentarias y gastronómicas hacen que algunos productos como la algarroba se coticen muy caros debido a la gran demanda existente. Por otra parte y dependiendo de la zona de la provincia, los cítricos o el níspero también son productos vigilados por lo rentable que resulta su venta ilegal.
Según nos han explicado el cabo Daniel y el guardia José, también están dedicados a investigar el robo de otros materiales clásicos por su alto precio en el mercado negro, como el cobre, la chatarra o los catalizadores de coches que contienen paladio o platino entre otros.