No es la primera, ni será la última. Tienen tiempo y sobre todo, tienen necesidad de vivir en barrios que cuenten, como mínimo, con las mismas dotaciones que el resto de la cuidad. Rechazan el concepto de ser vecinos de tercera, no se lo merecen y pagan impuestos como en otros barrios que consideran privilegiados con respecto a ellos. Desde que los terrenos quedaron liberados por el soterramiento de las vías del tren, se entusiasmaron con la idea de vivir en un entorno en el que las administraciones por fin crearan la tan ansiada zona verde y de servicios de la que se había hablado en la ciudad desde hace más de 20 años. El tiempo ha pasado, los alcaldes han cambiado y los vecinos decepcionados y el entorno, siguen siendo los mismos, si cabe, todavía peor por el paso del tiempo y la falta de inversiones. Critican que la zona sea vista con fines especulativos y que en tanto en cuanto no se le saque partido económico, no se ejecute ni una sola mejora que redunde en la calidad de vida de los vecinos. Personas trabajadoras que lamentan encontrarse con cierta frecuencia con vertidos de escombros, alcantarillado que carece de trapas, vehículos robados abandonados y barrizales intransitables cuando llueve sobre la ciudad de Alicante. No renuncian a la creación del Parque Central, y con esa idea mantienen sus reivindicaciones, pero se han propuesto exigir paso a paso cada una de las acciones prometidas por AVANT, como los pasos de peatones que unirían los barrios ribereños de los terrenos liberados, algo que ven cada vez más difícil pese al compromiso de las administraciones implicadas, puesto que se acaba el año 2021 y ni siquiera se han licitado. En Más de uno Alicante, con Luz Sigüenza, hemos hablado con Julio Díaz y José Vicente Gosalvez, miembros de 'Vecindario por un Parque Central', quienes insisten en que no van a cesar en la lucha que les mueve desde hace décadas: exigir calidad de vida para los vecinos del entorno de los terrenos que algún día albergarán el Parque Central.