Un ciclista resultó herido este pasado domingo cuando circulaba por el parque forestal urbano del monte Orgegia, en Alicante, tras recibir más de 100 perdigonazos de un cazador que le confundió con un conejo, que impactaron en su zona lumbar, piernas, brazos y manos. El Ayuntamiento de la ciudad ya ha pedido que se tomen medidas para evitar que este suceso se vuelva a repetir.
El ciclista observó dos cazadores por las inmediaciones, pero fue disparado, a los pocos metros, por un tercero que le disparó al menos un cartucho cargado con numerosos perdigones, que le impactaron en diversas zonas de su cuerpo.
La documentación del cazador se encontraba en regla
Fue el propio ciclista el que pidió auxilio al 112 tras lo sucedido para ser atendido por la unidad de Partidas Rurales de la policía local alicantina y por una ambulancia. Hasta el lugar se trasladaron varios agentes y personal sanitario para poder atender al herido.
El cazador, que se encontraba en ese momento en una jornada de cacería junto a su familia, poseía todos los permisos en regla y se encontraba en una zona habilitada para realizar esta actividad, según han informado fuentes municipales.
En su relato a los agentes, el cazador alegó que había confundido el movimiento del ciclista con el de un conejo y admitió que le disparó con un cartucho, que contiene un alto número de perdigones, lo cual concordaría con el testimonio de la víctima sobre que había sufrido decenas de perdigonazos.
El Cuerpo Nacional de Policía determinará si es necesario iniciar una investigación
La Policía Local de Alicante ha abierto diligencias y ha remitido el informe de los hechos al Cuerpo Nacional de Policía y los juzgados para que determinen si el autor de los hechos puede haber incurrido en un delito de imprudencia.
Según fuentes policiales, el ciclista se encuentra fuera de peligro.
