El Gobierno Autonómico ha aprobado un decreto que regula la estructura y organización del Servicio de Emergencias Sanitarias en la Comunitat Valenciana. Es el paso previo para que Alicante vuelva a tener un Centro de Coordinación de Urgencias, que durante la pasada legislatura fue centralizado en Valencia, a pesar de la oposición de los sindicatos de la sanidad y otros colectivos médicos.
Según la portavoz del Consell, Ruth Merino, esta aprobación demuestra que el Gobierno cumple con lo prometido, no se queda en anuncios. Ahora se trabajando en la selección y formación del personal de las unidades funcionales para que puedan prestar sus servicios cuanto antes.
El decreto recoge que este servicio podrá disponer para su mejor funcionamiento de unidades operativas funcionales distribuidas en la Comunitat Valenciana, que cubran todo el territorio, y que al menos exista una unidad como mínimo en Valencia, Castellón y Alicante.
En todo caso, todos los CICU dependerán íntegramente del Servicio de Emergencias Sanitarias. La Conselleria de Sanidad va a invertir dos millones de euros para dotar a los CICU de Alicante y Castellón de todos los recursos materiales y humanos necesarios para su puesta en funcionamiento. De esta manera, se incrementarán en 41 las plazas de profesionales del CICU, que pasarán de 109 actuales a un total de 150 plazas.
En concreto, habrá 14 nuevas plazas de personal médico coordinador; ocho de Enfermería y 19 de locutores o locutoras. Por tanto, la plantilla global quedará integrada por 42 puestos de personal médico coordinador, 43 profesionales de Enfermería, 55 locutores o locutoras y diez documentalistas.
El decreto establece además que el Servicio de Emergencias Sanitarias se gestionará íntegramente a través de un único centro directivo y mediante un único centro de gasto.
