La Universidad de Alicante y la fábrica CEMEX han firmado un convenio que analizará el volumen de absorción de CO2 de las Paulownias que la cementera ha plantado junto a sus instalaciones. El estudio analizará, además de la capacidad de captación de dióxido de carbono de estos árboles, su influencia en la composición de los suelos. Y es que, se trata de una especie vegetal caracterizada por su rápido crecimiento, ha indicado la Institución Académica en un comunicado.
El proyecto, liderado por el catedrático de la Universidad de Alicante y experto en ecología, Jordi Cortina Segarra, contará además con el trabajo de otros dos investigadores del Departamento de Ecología de la Universidad, David Fuentes y Alejandro Valdecantos. En este sentido, el estudio se dividirá en tres fases: el análisis de la plantación y el acopio de información sobre su gestión y cartografía; muestreo y análisis de los suelos y de la vegetación en la que se enmarcan; y por último, se calculará cómo su integración en la fábrica afecta a los flujos anuales de carbono en la planta y en el entorno. Según Jordi Cortina, “la implicación de CEMEX en la reforestación de antiguos cultivos y la restauración de canteras en desuso supone un paso adelante en la buena dirección. La Universidad puede contribuir a aumentar la calidad de estas acciones”.
LAS PAULOWNIAS
En 2019, CEMEX decidió iniciar la plantación de Paulownias en el entorno de la fábrica de Alicante debido a sus especiales características de crecimiento y por ser considerada una especie que absorbe diez veces más CO2 que otros tipos de árboles. Desde esa fecha CEMEX ha ido ampliando la superficie cultivada con esta especie, que en la actualidad ocupa ya una extensión de ocho hectáreas y suma 3.200 árboles.
Según señala Oscar Nasarre, director de la fábrica, “esta iniciativa y el estudio de su impacto se enmarcan en la estrategia de cambio climático de CEMEX, Futuro en Acción. Las conclusiones que se obtengan nos permitirán valorar la ampliación de la plantación con nuevos ejemplares e incluso la conveniencia de exportar esta iniciativa a otras plantas de la compañía”.
El resultado de este proyecto de investigación culminará con la redacción de un informe en el que quedarán especificados los niveles de carbono captados, tanto por cada planta de forma individual como por la totalidad del área reforestada. Asimismo, la UA desarrollará un modelo que permita a la compañía actualizar los resultados a medida que vaya creciendo la plantación.
En estos momentos CEMEX está inmersa en un plan global, denominado Futuro en Acción, focalizado en alcanzar la neutralidad en carbono de sus procesos y productos con el compromiso de conseguir un hormigón cero emisiones para 2050 y una reducción de las emisiones de CO2 en Europa del 55% en 2030, tomando como base 1990.