La obra comenzó en 2010 con los anteriores gobiernos regionales del PP que optaron por paralizarla en 2013 por falta de fondos y que ha sido rematada por el actual Gobierno del Botànic.
El proyecto ha supuesto una inversión de 33 millones de euros, 10 de los cuales se corresponden con esta última fase que permite que los tranvías que históricamente han circulado por la primera línea litoral, lo hagan ahora por el interior de los 1.477 metros de longitud que tiene el túnel que ha sido puesto en servicio esta mañana ante la presencia del Presidente Ximo Puig y el alcalde de Alicante Luis Barcala.
Está previsto que a finales de febrero de 2019 comience a funcionar con plenitud y por doble vía de circulación lo que permitiría mejorar las frecuencias y los tiempos de todas las líneas del TRAM.