Agentes de la Policía Nacional han detenido en Alicante a tres personas --dos hombres y una mujer-- responsables de una empresa de reformas y servicios de limpieza por presuntamente explotar laboralmente, con jornadas de doce horas y sin contrato, a 21 personas migrantes que se encontraban en situación irregular en el país.
La investigación se inició tras tener conocimiento los agentes de la Unidad Contra las Redes de Inmigración Ilegal y Falsedad Documental de la Comisaría Provincial de Alicante UCRIF III de que en una empresa de limpieza y pequeñas reformas presuntamente se estaba dando empleo a ciudadanos extranjeros en situación irregular y sin contrato de trabajo, según ha indicado la Policía Nacional en un comunicado.
En las primeras gestiones policiales, los agentes averiguaron que dicha empresa era regentada por dos personas, un hombre y una mujer, ambos dados de alta como autónomos y que tenían a su cargo a tres empleados.
Sin embargo, en las vigilancias realizadas descubrieron que alrededor de 25 personas, vestidas con prendas con el logotipo de esa empresa, entraban y salían de las oficinas de la empresa con productos y utensilios de limpieza. Posteriormente, se desplazaban en vehículos propiedad de la empresa hasta diferentes edificios de Alicante, donde realizaban trabajos de limpieza.
Para culminar esta investigación, los agentes contaron con la colaboración de la Inspección de Trabajo de Alicante, junto con los que realizaron una inspección y registro en la empresa de limpieza. En el momento de la inspección, los agentes hallaron en el interior de las oficinas un total de 29 personas. Dos de ellas eran los regentes de la empresa y las 27 restantes eran trabajadores de la empresa, de los cuales solo tres estaban dados de alta en la Seguridad Social.
El resto de empleados, 24 en total, carecían de contrato laboral y 21 de ellos además se encontraban en situación irregular en España, en su gran mayoría de origen colombiano y procedentes mayoritariamente de países con un alto número de demandantes de asilo.
Ante estos hechos, los policías detuvieron a los dos regentes de la empresa y al encargado, acusados de los delitos de pertenencia a grupo criminal, favorecimiento de la inmigración irregular y contra los derechos de los trabajadores.
La investigación concluyó que las víctimas llegaban a realizar jornadas maratonianas de trabajo de unas doce horas, no tenían establecida una hora fija de finalización de su jornada laboral y solo podían descansar un día a la semana. Además, el salario que percibían estaba "muy por debajo" del establecido según el convenio laboral.
Algunas de las víctimas habían estado trabajando para la empresa durante dos años, aprovechándose los arrestados de su situación irregular, sabedores de que estos empleados no tenían otro medio de subsistencia posible.
Posible contabilidad en B
Por otro lado, tras ser revisada la documentación intervenida durante la inspección, los agentes hallaron lo que parecía ser una "contabilidad B" de dicha empresa. Por ello, siguen realizando gestiones con el fin de determinar si los detenidos estuvieran incurriendo también en un posible de delito de blanqueo de capitales.
Los detenidos, dos varones y una mujer de entre 29 y 48 años de edad, fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de guardia de Alicante.
La Policía ha señalado que el modo ilícito de actuar de esta empresa les permitía ofrecer "precios tan competitivos en el sector que prácticamente no tenían competencia", generando un desmoronamiento en los precios de trabajo, al ofrecer sus servicios a precios muy por debajo del coste, con los que empresas legales no podían competir.