El calvario del alumnado de la Universidad de Alicante que cada semana debe recorrer el camino que separa el apeadero de Renfe y San Vicente toca a su fin. Después de años de reivindicaciones desde la UA, el Ministerio de Transportes pondrá por fin solución al punto negro en la rotonda de bomberos de la A-77A mediante la construcción de un paso inferior que permitirá el tránsito del alumnado de manera segura.
Las obras comenzarán el próximo lunes, 17 de junio, con un corte total de la calzada sentido Alicante, una intervención que tendrá una duración estimada de cinco semanas y el 22 de julio las obras continuarán con el corte total de la calzada en dirección a Alcoi, de nuevo con una duración estimada de cinco semanas y está que el paso inferior esté finalizado para el inicio del próximo curso.
Salvador Ivorra, vicerrector de Infraestructuras, Sostenibilidad y Seguridad Laboral, ha señalado que “desde la Universidad de Alicante llevamos años reivindicando que se ponga una solución a un grave problema de seguridad en la rotonda de bomberos por donde semanalmente cruzan muchos estudiantes con maletas que se desplazan en el tren de cercanías hasta San Vicente donde residen durante la semana para estudiar en la UA”.
Ivorra se ha mostrado muy satisfecho por el inicio de unas obras muy esperadas en la UA y ha recalcado que “llevamos tiempo advirtiendo que se trata de un grave peligro y que no se podía esperar a que sucediera una tragedia para actuar”. El vicerrector de Infraestructuras, que ha asumido personalmente esta reivindicación, considera que “esta actuación sirve para humanizar la rotonda al eliminar la barrera física y proporcionar una ruta más segura para los peatones”. El vicerrector reconoce que la Subdelegación del Gobierno en Alicante ha mostrado una gran sensibilidad por este problema y ha insistido al Ministerio la necesidad de esta actuación.
Con este calendario de obras se logra una de las exigencias que la Universidad de Alicante ha puesto encima de la mesa para la realización de esta infraestructura que es la de minimizar su impacto sobre la comunidad universitaria. Salvador Ivorra, ha señalado que “para la Universidad de Alicante era muy importante que las obras se realizarán en periodo no lectivo como así será finalmente”.